Entre cambios, denuncias a agentes especiales y modificaciones en los más altos mandos, el Ministerio del Interior se ha convertido en uno de las carteras más sensibles del Gobierno de Pedro Castillo, quien ha efectuado un último y preocupante movimiento, el cambio del inspector general de la PNP y la asignación de Raúl Enrique Alfaro como jefe de la Policía Nacional del Perú.
Ante esta polémica cabe preguntarse, cuáles son las intenciones del presidente al hacer movimientos tan importantes como estos en medio de una denuncia contra Harvey Colchado, jefe del Equipo Especial de la PNP que realizó la intervención hacia Palacio de Gobierno. Para esclarecer la situación, La República consultó al exministro del Interior Rubén Vargas.
PUEDES VER: Pedro Castillo retira al comandante general, jefe de Estado Mayor e inspector general de la PNP
—¿Qué es lo que estaría buscando Pedro Castillo con los cambios realizados este sábado 27?
—Amedrentar y amenazar al coronel Colchado y a los policías que están investigando eso que la Fiscalía ha llamado una organización criminal que actúa desde el poder.
Tratar de captar al comando policial para los fines de esa estructura criminal que, según las autoridades, estaría encabezada por el presidente de la República. Y, por supuesto, está finalmente ejecutando, confirmando las amenazas que en su momento hizo su cuñada-hija, cuando fue detenida por el coronel Colchado. Recordemos que Yenifer Paredes se atrevió a amenazar con pases al retiro.
Ahora, el presidente está confirmando que esas amenazas eran una guerra avisada y lamentablemente lo que está haciendo el presidente, en su condición de jefe supremo de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional, es un acto flagrante, alevoso, de abuso de poder. El presidente está en la condición de hacer los cambios en el comando policial, pero no puede hacerlo para tratar de evadir su responsabilidad.
PUEDES VER: Segundo Mejía Montenegro, el nuevo inspector general de PNP que habría espiado a alumnos de la UIGV
—Dentro de estos cambios, llama la atención el de la Inspectoría, que es la instancia que debía evaluar la denuncia contra Harvey Colchado. ¿En qué influiría que quien antes era inspector ahora pase a ser la cabeza de la PNP?
—La información que tengo es que el general Vera Llerena, el anterior comandante general, había manifestado, había mostrado su incomodidad, precisamente por esa denuncia y por la forma como se estaba tramitando esa denuncia al interior de la Policía Nacional.
El resultado es que ahora el general Vera pasó a retiro y, el que estaba realizando esa investigación desde Inspectoría General contra el coronel Colchado, ahora es el nuevo comandante general.
PUEDES VER: Congreso: citan para este lunes al ministro del Interior por cambios en altos mandos de la PNP
Pero también hay que señalar, y tengo también esa información de fuente directa, que a Inspectoría ingresaron esa queja, una denuncia fabricada contra la Diviac y contra el coronel Colchado, con la intención de ensuciar el nombre de Diviac, con la intención de desprestigiar al equipo y al Colchado.
Es una situación bastante crítica, bastante difícil y esto da cuenta de que hay un sector de malos policías que han equivocado el camino. Estamos advertidos que se viene una campaña negra contra la Diviac y el coronel Colchado.
—¿Por qué existiría esta persecución contra el coronel? ¿Por qué tanto miedo contra Harvey Colchado?
—Es lógico que así sea. Yo siempre he sostenido que no hay un enemigo más claro ni más reñido para un político corrupto que un policía honesto.
PUEDES VER: Exministro del Interior afirma que Castillo le dijo que consideraba a Harvey Colchado como su enemigo
—¿Le sorprende a usted la designación de Enrique Alfaro como jefe de la PNP? Mariano González lo describió como un policía honesto.
—Respecto al general Alfaro, el único camino que le queda para reivindicar a la Policía es sacar un pronunciamiento apoyando a los cuatro coroneles que están investigando a una presunta organización criminal que opera desde el Palacio de Gobierno.
Si el actual comandante general es un institucionalista que va a defender los fueros de la Policía Nacional, lo que corresponde es inmediatamente su pronunciamiento.
—¿Qué tan expuesta queda la Policía y la Diviac ante estos cambios?
—Lo que quieren es destruir al Equipo Especial porque saben que ese equipo es el encargado de realizar las corroboraciones de la información que están brindando los colaboradores eficaces, ese es un trabajo sumamente delicado. No quieren que eso ocurra.
Le tienen un miedo especial a estos policías que ahora vemos que están haciéndolo de manera muy profesional. Quieren evitar, a toda costa, la corroboración de la información que están brindando los colaboradores eficaces.
—¿Estaríamos hablando de una posible obstrucción a las investigaciones con estas denuncias?
—Sin ninguna duda es eso lo que están haciendo. Primero intentar debilitar al Equipo Especial con anuncios de evaluaciones, con anuncios de nuevos miembros. Es más, recordemos que el ministro del Interior fue en persona a solicitar al Ministerio Público para que se modificara la composición del Equipo Especial.
Hay un interés manifiesto desde siempre de querer debilitar, de querer destruir con el cuento de fortalecer.
—¿Cómo percibe la gestión de Willy Huerta en todos estos cambios?
—El ministro se ha convertido en un escudero más del presidente de la República, el señor Huerta no es ministro del Interior, es escudero del presidente.
PUEDES VER: Congreso: Waldemar Cerrón ofrece obras para Junín pese a que no tiene las facultades para ejecutarlas
La inseguridad en el Perú está desbordada, absolutamente desbordada; los mineros ilegales están atacando destacamentos policiales; los delincuentes están haciendo de las suyas, están asesinando por un celular; las extorsiones están cada vez más desbocadas. No hay ministro de Interior, hay un escudero del presidente.