La justicia llegó 37 años después. Los excoroneles del Ejército Peruano Ricardo Matta y Diego Cortez fueron sentenciados a 15 y 12 años de prisión, respectivamente, tras ser acusados de la desaparición forzada del líder sindical Teófilo Rímac Capcha. Este fue calificado como un crimen contra la humanidad que se registró el 23 de junio de 1986 en Cerro de Pasco.
Según parte de los relatos históricos, se dice que un grupo de soldados vestidos con uniformes lo capturó en su residencia en San Juan Pampa y luego se encargó de su desaparición. En el 2020, Doris Caqui, viuda de Rímac Capcha, expresaba su preocupación por el incumplimiento del acuerdo establecido entre el Ministerio Público y la Dirección de Búsqueda de Personas Desaparecidas. Esta medida establecía la necesidad de una colaboración conjunta para permitir la presencia de los familiares durante las labores del equipo especializado.