Mientras se sigue cuestionando las prerrogativas de la congresista María del Pilar Cordero para acceder a la celda de Alberto Fujimori, poco se conoce respecto del pasado y presente de la parlamentaria. Cordero Jon Tay culminó estudios de Ciencias de la Comunicación en la Universidad Privada Los Ángeles de Chimbote, según consta en su hoja de vida presentada al Jurado Nacional de Elecciones (JNE). Sin embargo, según un comunicado emitido a mediados del 2009 por la Asamblea Nacional de Rectores (ANR), dicha casa de estudios no tiene existencia legal. El comunicado de la ANR es tajante. Dice así: “Hacemos de conocimiento que los exámenes de admisión y estudios promovidos por la entidad que usa las denominaciones Universidad Privada Los Ángeles o empresa Universidad Los Ángeles S.A. o empresa Universidad Los Ángeles S.R.L., en diversas ciudades del país, carecen de valor legal. Por lo tanto, los estudios que ofrece, así como los grados académicos y títulos profesionales que otorga esta entidad no tienen validez legal dentro del sistema universitario peruano”. Es evidente que los certificados de estudios universitarios que sustentan la hoja de vida entregada por Cordero Jon Tay al JNE, no tienen validez. En su declaración jurada -otro de los documentos de acreditación ante el JNE-, la representante parlamentaria de Tumbes refiere de experiencia laboral su desempeño como trabajadora de una empresa del sector privado de nombre: María Del Pilar Cordero Jon Tay, o sea, es trabajadora de su propia empresa. Se sabe que la congresista montó en el distrito fronterizo de Aguas Verdes una empresa dedicada al comercio textil. Lamentablemente el negocio fue clausurado por la Sunat debido a irregularidades tributarias y no ha vuelto a ser reactivado. El propio director de la PNP de Tumbes responsabilizó a María del Pilar Cordero por el uso indebido de uno de los ocho patrulleros de que dispone la ciudad en labores que no tienen que ver con la seguridad local. Antecedentes como éstos se condicen con la profesión de fe "cristiana evangélica" que reclama la congresista Cordero Jon Tay.