Para Fiscal de la Nación, magistrado parece más abogado de una de las partes. Autoridad reclama que encargado del caso no haya valorado a tiempo datos de la PC de León que Fiscalía le entregó, ni los audios que fueron sustento de denuncia. César Romero. Como “abogado estratégico de una de las partes” calificó la fiscal de la Nación, Gladys Echaíz, la actuación del juez Jorge Barreto en el caso Petroaudios, donde ha sido muy favorable a la defensa del procesado Rómulo León Alegría. Echaíz criticó que el juez, recién a “último minuto”, dijera que la fiscalía no cumplió con entregarle los petroaudios como prueba de las actividades de León Alegría a favor de Discover Petroleum International. Al respecto, anotó que el juez es el director de la investigación y que, como tal, pudo de oficio ordenar que se pongan a su disposición el material que servía de sustento a la denuncia, si consideraba que no se habían presentado y no esperar el final”. “Después de haber visto 400 documentos, el último día dice que ya no seguirá viendo esto porque no se ha ofrecido como prueba y, entonces, en calidad de qué los recibió”, declaró la fiscal de la Nación en entrevista al programa No hay derecho, de Ideeleradio. Agregó que la actuación del juez Barreto genera muchas inquietantes preguntas. “Espero que no sea lo que la imaginación pueda suponer, sino que se haya debido, no sé, a la falta de revisión del expediente, un descuido, una presunción de sí o no estaba dicho (…)”, anotó. Añadió que desde un comienzo pudo haber hecho la precisión y no esperar el último minuto para hacerlo. “¿Convirtiéndose en qué? En un abogado estratégico de una de las partes”, enfatizó Echaíz. La fiscal de la Nación también lamentó que el juez impidiera el ingreso de la fiscal Juana Meza y del procurador Jorge Caldas en las diligencias de visualización del CPU incautado a León Alegría, “El juez, el acusado y su abogado estuvieron a puerta cerradas en las diligencias, limitando el derecho del fiscal a actuar en un proceso de manera activa en representación de la sociedad”, anotó. Echaíz explicó que la fiscalía no pudo ver todo lo que había en ese CPU porque solo tenían 15 días para investigar, mientras que el juez tuvo 15 meses para analizar toda la documentación. Recordó que el Ministerio Público incautó la computadora de León, cumpliendo las formalidades de ley. “Creo que en estos temas que tienen una connotación social, uno debe ser un poco más transparente y abierto para evitar este tipo de especulaciones”, aseveró Echaíz. La fiscal agregó que ahora solo queda encontrar soluciones al problema planteado por el actuar del juez Barreto y que confía en que a nivel del juicio público, a la luz y con las puertas abiertas, se puedan suplir las deficiencias del juez. León Alegría espera libertad La fiscalía temía ayer que, en una última decisión, el juez Jorge Barreto ordene la libertad de Rómulo León Alegría arguyendo deficiencias de pruebas. El juez estaba analizando un pedido de León con ese argumento. En tanto, ante la oposición de la procuraduría, el juez Jorge Barreto suspendió la audiencia del viernes 22 de enero, en la que pretendía escuchar la sustentación del peritaje favorable a los acusados presentado por los peritos Germán Kasay Ahumada y Gaspar Zamora Chuquipiondo. Dicho peritaje fue solicitado por el propio juez Barreto y encargado a los únicos peritos que existen en el país en temas de hidrocarburos. Su informe se basa en su apreciación personal de una licitación y no en confrontación con documentos.