Un paro cardíaco acabó con la vida del ex fiscal de la Nación Miguel Aljovín, quien desde noviembre del 2002 permanecía en la clandestinidad, luego de que la Corte Suprema ordenase su captura por no asistir a juicio público. Pedían seis años de prisión. • Víctima de un paro cardíaco, nunca llegó a juicio público por encontrarse delicado de salud. Un paro cardíaco acabó ayer con la vida del ex fiscal de la Nación Miguel Aljovín Swayne, quien desde noviembre del 2002 permanecía en la clandestinidad, luego de que la Corte Suprema ordenase su captura por no asistir a juicio público. El deceso se produjo a las cinco de la mañana en su habitación de la clínica Ricardo Palma, donde permanecía bajo cuidados intensivos desde el 30 de enero pasado. Su abogado, Julio Rodríguez Delgado, sostuvo que sus restos serían velados en estricto privado. Aljovín, de 76 años, afrontaba un proceso por haber archivado en 1998 una investigación al ex asesor Montesinos por enriquecimiento ilícito. La fiscalía pidió imponerle seis años de prisión por los delitos de omisión de denuncia, prevaricato, asociación ilícita y peculado. Ahora el caso será archivado.