Alejandro Sánchez Sánchez, dueño de la casa de Sarratea, llegó a Perú luego de ser deportado de Estados Unidos. El Equipo Especial de Fiscales Contra la Corrupción del Poder (Eficcop) logró su proceso de deportación en el marco de las investigaciones por el caso ‘Asesores en la sombra’ y sus vínculos con el expresidente Pedro Castillo con quien habría orquestado una presunta organización criminal.
El empresario deberá pasar por el control de identidad ante el Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional de turno. Posteriormente, pasará por medicina legal, requisitorias y será puesto a disposición del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) para que ingrese a un centro penitenciario.
PUEDES VER: Harvey Colchado es el "doc" al que se refirió ministro Santivañez en audio, según su abogado
Una vez que el amigo de Pedro Castillo se haya establecido en una prisión, la ley le prevé viabilizar algunos mecanismos a los que se pueda acogerse, como colaboración eficaz, conclusión anticipada del juicio o confesión sincera, que deberá analizar en conjunto a su defensa.
Al respecto, Marita Barreto, coordinadora del Eficcop, dijo que Sánchez Sánchez sería llevado a un penal de máxima seguridad por haber huido de la justicia. "Nadie puede negarse a la persecución penal, al sometimiento de una investigación hasta que se establezcan los hechos. Huir complica su situación", declaró.
Sobre cómo el empresario logró llegar a Estados Unidos a pesar de contar con una alerta roja de Interpol, la letrada optó por no realizar ninguna especulación al respecto. Sin embargo, dejó en claro que este tema será objeto de investigación por parte de Eficcop.
El Ministerio Público emitió un video donde se registra la llegada de Sánchez Sánchez. Foto: captura de X/Ministerio Público
PUEDES VER: Dina Boluarte convocó al Congreso a pleno extraordinario para este 1 de julio por delegación de facultades
El empresario, originario de Chota, Cajamarca, es el propietario de la residencia ubicada en el pasaje Sarratea en el distrito limeño de Breña. En esta propiedad se llevaron a cabo las reuniones de Pedro Castillo con funcionarios, empresarios y familiares antes y durante el inicio de su mandato como presidente.
Estos encuentros provocaron que la Comisión de Fiscalización iniciara una investigación al expresidente, ya que se consideró que había violado los principios de transparencia al ser la máxima autoridad del Estado. Sánchez no solo mantenía una amistad con Castillo, sino que también habría financiado su campaña electoral.