El alcalde de Puente Piedra, Rennán Espinoza, logró escapar de la escena del choque de su camioneta. Sin embargo, no podría hacer lo mismo a las responsabilidades penales, pues estas evidencian la forma en que procedió tras verse involucrado en un aparatoso accidente en plena Panamericana Norte. Penalistas coinciden en que, al menos, se habrían cometido tres delitos que complicarían la situación de la autoridad edil y de los trabajadores de su municipio que lo ayudaron a fugarse.
El accidente se produjo en el peaje Chillón, al promediar las 2 p. m. del 1 de mayo, feriado por el Día del Trabajo. Rennán Espinoza y los trabajadores municipales de Puente Piedra celebraron con un campeonato en el estadio municipal del distrito. Tras ello, la autoridad y cuatro funcionarios a bordo de la camioneta —de propiedad de la empresa Rennan S. A. C.— protagonizaron el choque.
Los cuatro funcionarios fueron identificados como Alber Andy Azaña Jaramillo, Raúl Ludgardo Vásquez Casusol, Roy Huallpa Choquehuayta y Aimar Ibáñez. Todos salieron por sus propios medios, salvo Rennán Espinoza, quien fue ayudado para evacuar el vehículo. Las cámaras captaron posteriormente que dentro del auto había una caja con botellas de cerveza.
El alcalde y Aimar Ibáñez fueron subidos a una ambulancia. Faltando 50 metros para llegar al hospital, las cámaras de seguridad de la zona captaron que varias mujeres y el agente de serenazgo identificado como Eleazar Guerrero Cubas interceptaron la ambulancia y permitieron el escape de Espinoza y el funcionario. El sereno fue captado golpeando al efectivo que custodiaba el vehículo.
Respecto a los posibles delitos que se le podrían atribuir a Rennán Espinoza, La República conversó con abogados expertos en derecho penal. El letrado Andy Carrión explicó que él contempla un estimado —en la sumatoria de penas— de hasta 15 años, si es que la Fiscalía logra acredita la comisión de tres delitos: manejar en estado de ebriedad, resistencia a la autoridad y obstrucción a la justicia.
"Manejar en estado de ebriedad tiene una sanción que puede ir hasta los tres años, pero aquí está en cuestión quién habría manejado el vehículo porque él ha señalado que no sería el conductor. En las investigaciones tendrá que analizarse la situación de todos los presentes e ir determinando quién manejaba el vehículo", dijo.
Respecto a este punto, el Dr. Diego Rojas, abogado penalista del estudio Ugaz Zegarra, comentó que existen —hasta el momento— importantes medios probatorios para determinar quién manejaba la camioneta. Sin duda, ya aparecieron las primeras imágenes que se pudieron conocer a través de la prensa; no obstante, señaló que la investigación se sustentará de los testimonios de más testigos oculares y de las huellas dactilares que puedan tomarse del asiento del conductor.
El haberse negado a pasar por el dosaje etílico y desaparecer durante las horas posteriores implicará el presunto delito de resistencia a la autoridad, el cual presenta un mínimo de cuatro y un máximo de siete años de pena.
En tanto, el tercer delito sería de obstrucción a la justicia, así lo indica Andy Carrión: "El mismo Rennán Espinoza manifiesta que son funcionarios de la municipalidad (aquellos que lo ayudaron a salir de la ambulancia). Ahí hay otro delito que es el de obstrucción a la justicia (tres a cuatro años). Sumados estos delitos podría llegarse a los 15 años, pero igual tendrá que determinarse quién manejaba".
Por su parte, Diego Rojas explicó que también podría considerar dos delitos adicionales. El primero sería el de daño contra el patrimonio (no mayor de tres), puesto que el vehículo se impactó contra una garita y produjo el destrozo de infraestructura privada. Y, el más complicado, el de banda criminal: "Un conjunto de personas, en este caso, funcionarios que realizan de manera coordinada una actividad organizada para sustraer a una persona custodiada, podría constituir un delito de banda criminal, el cual tiene una pena no menor de cuatro, ni mayor de ocho años".
Después de cinco días de mantenerse al margen de los medios, el alcalde de Puente Piedra finalmente decidió romper su silencio y, durante una entrevista, negó rotundamente haber conducido la camioneta que protagonizó el accidente en el peaje Chillón, el miércoles 1 de mayo. En tanto, al no ser el conductor, sostuvo que no le correspondía pasar dosaje etílico.
Al respecto, Andy Carrión precisó que eso era inexacto, ya que todos los que estaban dentro del carro debían someterse al examen: "Sustraerse de ese dosaje etílico tiene una pena que puede ir desde los cuatro a los siete años de prisión. La norma no habla de quién maneja, sino que todos los que están presentes en el vehículo tienen que pasar por esa prueba".
En otro momento, Rennán Espinoza, pese a las imágenes, negó que se fugó de la ambulancia, dado que para él se encontraba en calidad de paciente, no de detenido; por ello, podía retirarse de manera voluntaria: "Sí, es paciente, pero también es una persona que habría participado en un accidente de tránsito. La sospecha (de que haya manejado o no) no quita que participó en un accidente que es materia de investigación. No es un argumento, no es sólido", sostuvo Diego Rojas.