El crucial blindaje al fiscal Chávarry para el fujiaprismo. ,En una decisión del parlamento vergonzosa pero que, precisamente por ello, no sorprendente, se votó por el blindaje a Pedro Chávarry –y, de yapa, a Héctor Becerril–, evidenciando que el fiscal de la nación es clave en la estrategia del fujiaprismo. A pesar de existir una investigación en el propio ministerio público (MP) contra Chávarry por presuntamente pertenecer a la organización criminal ‘los cuellos blancos del puerto’, se archivó su denuncia en la comisión permanente gracias a los votos de 17 congresistas que no se debe olvidar: El aprista Mauricio Mulder, y los fujimoristas Yeni Vilcatoma, Alejandra Aramayo, Karina Beteta, Úrsula Letona, Luis Galarreta, Rosa Bartra, María Melgarejo, Miki Torres, Percy Alcalá, Tamar Arimborgo, Rolando Reátegui, Milagros Salazar, Freddy Sarmiento, César Segura, Milagros Takayama y Mario Mantilla. Chávarry debe dar por lo menos un paso al costado porque existe sospecha fundada sobre su honestidad. También, porque es pieza clave del juego político del fujiaprismo para blindar a Keiko Fujimori y a Alan García de cualquier acto de corrupción. Chávarry es crucial para perseguir a quienes sean identificados por el fujiaprismo como peligro para la supervivencia ya no política de ambos partidos, que hoy en día ha sido demolida, sino judicial. Hay quienes sostienen que una evidencia de la ‘independencia’ de Chávarry es la detención de Keiko Fujimori. Pero eso es mentira. El fiscal de la nación no fue informado del operativo porque todos en el ministerio público desconfían de él. En ese contexto, la comisión de defensa del congreso, coordinada por Jorge del Castillo, fue usada ayer para perseguir al fiscal José Domingo Pérez, a partir de un comentario que hizo en México pero sin poder ocultar el verdadero propósito de poner contra la pared a quien es percibido como una amenaza desde el MP para Keiko Fujimori y Alan García. Es evidente que se está produciendo un acercamiento entre sectores que estaba peleados pero que, en la actual circunstancia, pueden llegar a alianzas. Por un lado, entre Fuerza Popular de Keiko y los Avengers de Kenji Fujimori. Por el otro, entre los apristas Mulder y Del Castillo. Y, como se ve, entre ambas agrupaciones que conforman el fujiaprismo. El fujiaprismo ha perdido el respaldo ciudadano y electoral, como lo registran las encuestas y los votos del 7 de octubre, pero esperan agruparse en el congreso para defender sus intereses judiciales, los últimos que les quedan, con todo lo que puedan.