El Congreso de México aprobó este miércoles una reforma constitucional que prohíbe la producción, distribución así como el uso ilícito de fentanilo, opioide que provoca miles de muertes en Estados Unidos.
Con 110 votos a favor y cinco en contra, el Senado dio luz verde a la iniciativa impulsada por el oficialismo de izquierda. La reforma ya había sido aprobada la semana pasada por la Cámara de Diputados.
La normativa deberá ser avalada ahora por los congresos locales de los 32 estados del país.
El texto prohíbe la producción, distribución y venta de cigarrillos electrónicos y dispositivos electrónicos similares como los llamados vapeadores, así como el uso ilícito del fentanilo "para proteger la salud de las mexicanas y los mexicanos".
La legislación busca "fortalecer el derecho humano a la salud, prohibiendo actividades relacionadas con cigarrillos electrónicos, vapeadores, precursores químicos y drogas sintéticas no autorizadas como el fentanilo", indica el documento aprobado.
El fentanilo, un opioide sintético desarrollado para tratar los síntomas del dolor crónico, es responsable de decenas de miles de muertes por sobredosis en Estados Unidos cada año.
Washington culpa a los cárteles mexicanos de manufacturar y traficar las dosis con insumos provenientes de China.
Tras la aprobación de la reforma en la Cámara de Diputados, comerciantes alertaron que la prohibición de los cigarrillos electrónicos dará paso a un mercado ilegal.
"La prohibición en ningún caso va a cancelar la demanda del producto", dijo a la cadena Milenio Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC). Según Rivera, en México hay unos dos millones de consumidores de estos productos.
En 2020, el gobierno del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador prohibió por decreto la comercialización de los cigarrillos electrónicos. Sin embargo, la Suprema Corte decretó al año siguiente que esta medida era inconstitucional.