El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, descalificó las recientes sanciones impuestas por Estados Unidos a 21 funcionarios venezolanos, tildándolas de “ridículas”. En un acto conmemorativo, anunció la creación de una nueva condecoración para honrar a quienes considera “patriotas”.
Durante la celebración del aniversario de la Aviación Militar de Venezuela, Maduro expresó su desdén hacia las medidas estadounidenses, afirmando que son un reflejo de un “Gobierno decadente”. La Cancillería venezolana también se pronunció, rechazando las sanciones y defendiendo a los funcionarios afectados.
Las sanciones, que incluyen a 15 militares, fueron impuestas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Tesoro de Estados Unidos y se justifican por la supuesta represión de la sociedad civil en el contexto de las elecciones presidenciales de Venezuela.
Las nuevas sanciones de Estados Unidos han sido objeto de críticas por parte del Gobierno venezolano. “Yo le cambio las sanciones ridículas del imperio por la condecoración de nuestra victoria de hace 200 años”, afirmó Maduro en su discurso. Este comentario resalta la postura desafiante del mandatario ante las presiones internacionales.
La lista de sancionados incluye a altos funcionarios de seguridad y defensa, como el jefe del servicio de inteligencia, Alexis José Rodríguez Cabello, y el general Javier José Marcano Tábata, entre otros. Según el Tesoro de Estados Unidos, estos individuos han estado involucrados en la represión de la oposición y en la manipulación de los resultados electorales.
En un intento por contrarrestar las sanciones, Maduro anunció la creación de la condecoración 'Gran Victoria de Ayacucho', destinada a reconocer la labor de los funcionarios sancionados. Este gesto busca reforzar la lealtad de sus aliados y presentar una imagen de unidad frente a las adversidades externas.
La condecoración se presenta como un símbolo de resistencia y orgullo nacional, en un contexto donde el Gobierno enfrenta críticas tanto internas como externas. Maduro defendió a los sancionados, describiéndolos como “eminentes profesionales” que han cumplido con su deber en un momento de crisis.
La oposición venezolana, liderada por figuras como María Corina Machado, ha denunciado el proceso electoral que llevó a la reelección de Maduro. Aseguran que las elecciones del 28 de julio fueron fraudulentas y han presentado documentos que, según ellos, demuestran irregularidades en el conteo de votos.
El clima político en Venezuela sigue siendo tenso, con un Gobierno que se aferra al poder y una oposición que busca desafiar su legitimidad. Las sanciones de Estados Unidos se suman a un contexto de crisis económica y social que afecta a la población venezolana.