El 27 de marzo de 1977, el aeropuerto de Los Rodeos, en Tenerife, fue escenario del mayor accidente aéreo de la historia, donde 583 personas perdieron la vida. La colisión de dos aviones jumbo, el KLM y el PanAm, ocurrió en medio de una confusión provocada por condiciones climáticas adversas y un desvío inesperado.
El accidente, recordado como el más grave en la historia de la aviación civil, tuvo lugar en el aeropuerto de Los Rodeos, en Tenerife, España. Dos aviones, uno de KLM y otro de PanAm, se dirigían al aeropuerto de Las Palmas en Gran Canaria, pero un aviso de bomba obligó a ambos a desviarse hacia Tenerife. Este aeropuerto, más pequeño, se vio rápidamente saturado por la llegada de múltiples vuelos.
El Boeing 747 de KLM, pilotado por el capitán Jacob van Zanten, estaba listo para despegar con 234 pasajeros y 14 miembros de la tripulación. Por su parte, el vuelo de PanAm, bajo el mando del capitán Victor Franklin Grubbs, contaba con 380 pasajeros y 16 tripulantes. La neblina redujo la visibilidad, complicando la situación en la pista.
En el terrible accidente perdieron la vida 583 personas. Foto: composición LR/Difusión
El avión de PanAm se encontraba estacionado detrás del KLM cuando se les ordenó retroceder por la pista. Sin embargo, la falta de claridad en las instrucciones y la densa niebla generaron confusión. Mientras el vuelo de KLM comenzaba a acelerar, el de PanAm seguía en la pista, lo que llevó a una colisión inevitable.
El vuelo KLM 4 fue visible solo ocho segundos antes del impacto. A pesar de los intentos del piloto por despegar, el choque ocurrió a una velocidad de 250 kilómetros por hora. La parte frontal del KLM impactó la parte superior del PanAm, causando la muerte instantánea de muchos pasajeros. El avión de KLM se estrelló y se incendió, resultando en la muerte de todos sus ocupantes.