En un histórico fallo emitido por el juez Arthur Engoron, el expresidente Donald Trump ha sido declarado culpable de una serie de cargos de fraude en Nueva York. Con ello, Trump y sus empresas asociadas han sido ordenadas a pagar 355 millones de dólares por “ganancias mal habidas”, según CNN.
“Su total falta de contrición y remordimiento roza lo patológico. Solo se les acusa de inflar el valor de los activos para ganar más dinero”, dice el juez Engoron en su fallo, en el que asegura que “los acusados son incapaces de admitir su error”. Y agrega: “En su lugar, adoptan una postura de 'no ver el mal, no oír el mal, no hablar el mal', que las pruebas desmienten”.
La sentencia además prohíbe al expresidente desempeñarse como funcionario, director u otra entidad legal de cualquier corporación de Nueva York por un periodo de 3 años. Asimismo, el juez determinó que prohíbe a Trump solicitar préstamos a cualquier institución registrada en el Departamento de Servicios Financieros de Nueva York.
El magistrado determinó que, basándose en las evidencias sólidas presentadas por la fiscal general James, se había exagerado el valor de los activos de la organización, fluctuando entre 812 millones de dólares y 2.200 millones de dólares en el período comprendido entre 2014 y 2021.
Esta sobrevaloración, considerada como fraude continuado, llevó al juez a dictar la disolución de las corporaciones encargadas de dichos activos a finales de septiembre, incluyendo emblemáticas propiedades como la Torre Trump y el histórico edificio neogótico, situado en el 40 de Wall Street.
Este último, a punto de celebrar su centenario, ha sido escenario de diversas conferencias de prensa ofrecidas por Donald Trump después de las sesiones judiciales. Frente a esta medida, el empresario presentó una apelación.
“Su total falta de contrición y remordimiento roza lo patológico”, afirmó el juez Arthur Engoron sobre Trump. Foto: AFP
No obstante, la sentencia no disuelve los certificados comerciales de la Organización Trump, como inicialmente había establecido el juez Engoron en su sentencia sumaria del último año.
Se anticipa que la defensa de Trump buscará apelar esta decisión y solicitará una suspensión de la ejecución del fallo mientras se evalúa la apelación. Este proceso podría prolongar la resolución final del caso.
El próximo 25 de marzo marcará un hito histórico, cuando Donald Trump se convierta en el primer exmandatario estadounidense en ser sometido a un proceso judicial penal. Este caso, que gira en torno a acusaciones de pagos para ocultar una relación con una actriz de películas para adultos, fue anunciado por un magistrado en Nueva York. La determinación de iniciar el juicio en esta fecha se produce en un momento crucial: Trump, a sus 77 años, está inmerso en la contienda electoral con el objetivo de regresar a la presidencia.
El juez Juan Merchan, responsable de la causa, desestimó las solicitudes de la defensa de Trump de aplazar el comienzo del juicio, que se iniciará con la selección del jurado. Merchan enfatizó la importancia de múltiples factores al tomar esta decisión.
Previo a la sesión en el Tribunal de Distrito de Manhattan, Trump expresó en su plataforma Truth Social que este caso no se habría presentado de no ser por su candidatura presidencial, insinuando motivaciones políticas detrás de las acusaciones.
Se anticipa que la defensa de Trump buscará apelar esta decisión y solicitará una suspensión de la ejecución del fallo mientras se evalúa la apelación. Foto: AFP
A pesar de enfrentarse a un total de 91 cargos penales en diversos casos, la popularidad de Trump no parece verse afectada. Las encuestas actuales lo posicionan como el candidato preferido frente a un hipotético enfrentamiento con el presidente Joe Biden en las elecciones de noviembre.