Un reciente ranking del índice de comercio sostenible (STI) de 2023, elaborado por la Fundación Hinrich en conjunto con el Centro de Competitividad Mundial (IMD), ha determinado el desempeño de la economía de los países en tres pilares subyacentes de la sostenibilidad: el plano económico, social y ambiental.
En este contexto, en un mundo donde cada vez somos más conscientes del impacto ambiental y social del comercio, las economías sudamericanas están mostrando notables avances hacia prácticas más sostenibles; por ello, es crucial identificar qué país de la región destaca por su economía sostenible y compararlo con Perú.
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En la carrera hacia la sostenibilidad en Sudamérica, Chile emerge como el líder, de acuerdo con el índice de comercio sostenible (STI) de la Fundación Hinrich. El país sureño se distinguió por su compromiso con la sostenibilidad: lidera no solo en Sudamérica, sino que también está bien posicionado en el escenario internacional al colocarse en el puesto 11 del ranking mundial. Su éxito en este ámbito es un ejemplo para otras zonas de la región, incluido Perú (puesto 21) y Ecuador (puesto 20), que también han mostrado avances significativos.
Las economías más sostenibles del mundo. Foto: captura de pantalla
La brecha entre Chile y Perú en términos de sostenibilidad, aunque presente, no es abismal. En los informes detallados, se ve que Chile obtiene un puntaje de 64,38 en cuanto a economía sostenible, mientras que Perú registra una puntuación de 38,54. En ese sentido, la diferencia de puntos entre ambas naciones es de 25,94.
Es importante resaltar que Perú ha tenido valiosos progresos en varios indicadores, especialmente, en el pilar ambiental, en el que ha obtenido reconocimientos notables. Esta proximidad en el ranking refleja la creciente importancia que Perú está otorgando a la sostenibilidad en su estrategia de desarrollo.
Finalmente, el índice de comercio sostenible es una herramienta fundamental para entender cómo las economías están equilibrando el crecimiento y la sostenibilidad. Tanto Chile como Perú, junto con otros países como Ecuador y México, están demostrando que es posible fomentar un comercio que sea económicamente viable, socialmente responsable y ambientalmente sostenible.