El último martes 8 de agosto, el paisaje turístico de la localidad de Lahaina, en Hawái, cambió a un tono gris por el incendio forestal que ha dejado como resultado más de 90 víctimas mortales. No obstante, hay personas que han sobrevivido a la tragedia ocurrida en la isla de Maui. Una de ellas es Annelise Cochran, quien pasó más de cinco horas en el océano junto a una roca a la espera de que los bomberos llegaran a su rescate.
Al ver como muchas personas perdían la vida a causa de las llamas, la joven y una mujer de mediana edad intentaron darse calor y respirar en medio del humo. A continuación, te presentamos el conmovedor testimonio de Annelise Cochran.
Annelise Cochran y una vecina pasaron más de 5 horas en el océano. Foto: Crónica de San Francisco/Instagram
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Después de pasar cinco horas en el mar, Annelise Cochran contó que sobrevivir a los incendios en Hawái “fue lo más cerca que se sintió de la muerte”. Así lo expresó en una entrevista al Washington Post. Pese a que todas las personas luchaban por salvarse, ella sentía preocupación por aquellos que se iban al fondo del mar, pues sabía de los peligros de las corrientes y la hipotermia que podían llegar a padecer. "Me siento bendecida de estar viva", expresó.
Asimismo, la joven de 30 años recordó que, durante la mañana del martes 8 de agosto, vio informes de un incendio forestal cercano a Lahaina, un hecho poco usual en la localidad en la que ha vivido los últimos siete años. Horas más tarde, Cochran registró unos videos en los que aparecen hojas volando a causa de un fuerte viento.
El incendio en Hawái se ha cobrado la vida de más de 90 personas. Foto: Crónica de San Francisco/Instagram
Cerca de las 4.00 p. m., Cochran, gerente de capacitación de una organización sin fines de lucro dedicada a la conservación de océanos, se percató de que el humo se volvía más denso y escuchó las alarmas de incendios. Al ver llamas en un estacionamiento, corrió a su departamento, tomó algunos artículos y subió a su auto.
Mientras conducía, un edificio empezó a arder, así que salió del vehículo y se dirigió al océano. En el camino, encontró a dos de sus vecinos, una mujer y un varón. Juntos decidieron cruzar la pared de la barrera y bajar a las enormes rocas negras para escapar de las llamas. Pasaron horas en el agua. Treparon rocas y trataron de mantenerse alejados de las brasas voladoras y los gases nocivos. Cerca de la medianoche del martes, Annelise Cochran y otras personas fueron rescatadas por los bomberos.