Cuando faltan 96 días para las elecciones en Estados Unidos, el presidente Donald Trump, que aspira a la reelección, sugirió este jueves 30 de julio postergar las elecciones de noviembre alegando que el coronavirus y el voto por correo amenazan de fraude el proceso.
“¿Retrasar la elección hasta que la gente pueda votar de manera adecuada y segura?”, se preguntó en un tuit.
“Con la votación universal por correo (no la votación en ausencia, que es buena), 2020 será la elección más imprecisa y fraudulenta de la historia. Será un gran bochorno para Estados Unidos”, escribió Donald Trump, en momentos en que los sondeos de cara a la votación de noviembre no lo favorecen.
Trump, quien en 2016 recibió unos 3 millones de votos populares menos que su rival demócrata Hillary Clinton y llegó a la presidencia por los votos del Colegio Electoral, aparece ahora en la mayoría de las encuestas a la zaga de su posible rival, el demócrata Joe Biden.
En razón de la pandemia de COVID-19, numerosas autoridades estatales, el Partido Demócrata y organizaciones de la sociedad civil promueven el voto por correo para la elección del 3 de noviembre que, además de decidir la presidencia del país, renovará un tercio del Senado y la totalidad de miembros de la Cámara de Representantes.
En una entrevista reciente con la cadena FOX, Donald Trump ya sugirió que “tendría que ver” si acepta el resultado de la elección, algo que ya había hecho también pocas semanas antes de la elección de 2016.
En 244 años de existencia de la República nunca se ha suspendido una elección nacional en Estados Unidos, ni siquiera la de 1864, que ocurrió cuando el país estaba en el tercer año de su Guerra Civil.
De acuerdo con la Constitución, el gobernante estadounidense no tiene autoridad legal para postergar o cancelar una elección y “el Congreso debe determinar la fecha de elección de los electores y el día en el cual emitirán sus votos, con esa fecha aplicable para todo el país”.
El país superó este miércoles las 150.000 muertes por coronavirus, un 22.6 % de todas las reportadas en el mundo de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins. En concreto, registró 150.447 fallecidos y 4.414.834 casos confirmados.
Este balance es de 68.086 contagios más que el martes y de 1.362 nuevas muertes. Pese a que Nueva York ya no es el estado con un mayor número de contagios, sí sigue como el más golpeado en cuanto a muertos en Estados Unidos con 32.658, más que en Francia o España.
Con información de EFE y AFP.