Joan Manuel Serrat dio una conferencia en Argentina a propósito de su despedida de los escenarios. “Mi corazón me dice que esté tranquilo. Vengo a despedirme de los escenarios, no del país, ni de la gente, ni del cariño que nos ha unido durante los últimos sesenta años”, dijo a los medios el artista de 78 años.
El cantautor catalán que presenta su gira de conciertos ‘Por el vicio de cantar. Serrat 1965-2022′, habló de su decisión de abandonar las presentaciones, pero sostuvo que seguirá haciendo música. ”Tomé esta decisión de retirarme de los escenarios, que es dejar tal vez una de las partes más divertidas de mi oficio, pero también la más rigurosa. Dejo de actuar, pero no de escribir, de componer, de vivir, ni de amar”.
La decisión de anunciar su retiro en diciembre del 2021, la tomó cuando uno de sus colegas contemporáneos, otro referente de la música con el cual tenía una gira de conciertos, se accidentó.
“Empecé a pensar en el retiro el día que (Joaquín) Sabina tuvo la mala fortuna de caerse del escenario –en febrero 2020 en Madrid–, y por eso tuvimos que suspender nuestra tercera gira juntos”, dijo sobre el intérprete de ‘Y sin embargo te quiero”.
“Ahí surgió la necesidad de aclarar el futuro o por lo menos de ver dónde estaba parado. Justo después de esto llegó la pandemia, nuestras vidas cambiaron y hubo que adaptarse. Estuve recluido en casa porque se cerraron los teatros, nuestros lugares de trabajo, y eso nos fue apartando de la cotidianeidad del oficio. Este distanciamiento tan largo me hizo ver que el tiempo se me acortaba y me planteé que quizás era un buen momento para decidir acerca del futuro. No tenía fuerzas ni tiempo para reiniciar en un lapso tan corto y pensé en una última gira, cuando se pudiera, y quedarme con este buen sabor de boca que me deja este oficio”.
Serrat inició la gira ‘Por el vicio de cantar’ en abril, en el Beacon Theatre de Nueva York . En Perú se presentará este 16 en Plaza Arena y, tras Sudamérica, estará en España y terminará la gira el 23 de diciembre en su Barcelona natal. “No conté los conciertos que hice hasta ahora, tampoco los que me quedan por hacer. Es más bien una actitud defensiva, porque esta gira está hecha de trampas. Entre emociones y nostalgias me acecha un sentimiento tremendo de alejamiento de algo que me hizo muy feliz durante décadas. Llevo cada uno de los conciertos como el único y trato de no menear demasiado estas emociones, porque sé que estaría meneando directamente mi alma”.