El régimen de Dina Boluarte arremete, una vez más, contra la autonomía e institucionalidad de los organismos públicos. En esta ocasión, removió a Carlos Oliva de la presidencia del Consejo Fiscal, frente que desde hace 10 años evalúa los lineamientos en la administración de los recursos públicos.
Según Boluarte, Oliva no puede seguir como presidente del CF —adscrito al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF)—. Fuentes de La República contaron que la continuidad del también director del BCRP debió haberse definido en diciembre del 2023; sin embargo, el directorio apostó por prolongar su estadía, y al solicitárselo a Boluarte, esta consideró adecuado removerlo del cargo que ocupaba desde finales del 2020.
En más de una ocasión, el Consejo Fiscal presidido por Oliva ha cuestionado la ruptura de la regla fiscal —durante la gestión de Alex Contreras— y que no haya claridad sobre las proyecciones de crecimiento. Incluso, hace unos días, Oliva aseguró a La República que el MEF tiene que explicar la transferencia de S/100 millones para la construcción de un estadio en Ayacucho, en el marco de la controversia que involucra a la presidenta y al gobernador de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, por el caso Rolex.
“Si tú quieres cumplir con la regla fiscal, pues no te pongas a dar plata que no tienes”, anotó Oliva para este diario.
Según el economista José Távara, la destitución de Carlos Oliva llega a modo de represalia por parte de Dina Boluarte por “desempeñar sus funciones en el Consejo Fiscal como corresponde” y “sin hacerse de la vista gorda”. “Es inaudito cómo vienen destruyendo nuestra ya debilitada institucionalidad”, añadió para este diario.
El exministro Luis Miguel Castilla alega que la voluntad de Boluarte implica un retroceso a todas luces porque no se habría oído al MEF ni considerado el contrapeso técnico que carga el Consejo Fiscal. Agrega que Oliva cumplió con ser el portavoz de las decisiones fiscales y sería un grave error reducir a su persona el rol que cumple el CF a pesar de sus últimas declaraciones sobre Oscorima y Boluarte, así como por la crítica a la emisión de bonos de la Municipalidad de Lima hasta por S/4.000 millones —que endeudarán a los próximos cinco alcaldes—. “Sus declaraciones sobre las supuestas desviaciones (de recursos) no han caído bien y por eso no lo ratifican”, subrayó.
En ese contexto, es menester precisar que el MEF romperá por segundo año consecutivo con la regla fiscal, ya que el déficit será mayor de 2% del PBI, y con la decisión de Boluarte, los especialistas sostienen que se transgrede flagrantemente a las instituciones económicas, tal como viene sucediendo en otras instancias, como la separación de Harvey Colchado de la Diviac y por la denuncia de Rudecindo Vega, destituido de la Conafovicer por “declaraciones políticas”.
PUEDES VER: Netflix, Max, Disney pagarán impuestos: Gobierno cobrará IGV del 18% a servicios de streaming
En tanto, el también exministro Pedro Francke considera que el titular del MEF, José Arista, está que despide al mensajero porque no le gusta que le recuerden sus obligaciones.
“Es una muestra del deterioro de la institucionalidad democrática que registra el país desde hace un par de años”, manifestó Francke Ballvé, quien asegura que no se sabe quién maneja la política tributaria al también manifestarse, desde otra cartera, la intención de retomar los beneficios a sectores como las empresas agroexportadoras.
Ayer en declaraciones luego del Consejo de Ministros, el ministro Arista aseveró que la salida de Oliva del Consejo Fiscal no se dio por críticas al Gobierno.
“Su periodo como presidente del Consejo Fiscal terminó el 31 de diciembre y por un proceso de renovación natural no ha sido considerado para un segundo periodo de tres años (...) No tiene nada que ver con un comentario (sic) si había declarado por la transferencia que se hizo a Ayacucho. No tiene nada de ilegal. Invito a Contraloría y a las autoridades competentes a que vengan y revisen los expedientes a ver si hubo algo fuera del marco legal”, comentó.
Pedro Francke considera que el Gobierno de Boluarte está mucho más orientado a no respetar la institucionalidad fiscal y se aparta del manejo responsable por temas de pactos políticos a fin de conseguir los votos de Renovación Popular y “hacer cualquier cosa con tal de tener sus votos en el Congreso”.
Luis Miguel Castilla, exministro de Economía y Finanzas
“Es una pésima decisión del Gobierno porque se debilita el contrapeso técnico del CF. Las declaraciones sobre las presuntas desviaciones (de recursos) no han caído bien y por eso no lo ratifican”.
Pedro Francke, exministro de Economía y Finanzas
“El Gobierno está mucho más orientado a no respetar la institucionalidad fiscal y el riesgo de irresponsabilidad en este terreno está creciendo, hay señales de un desmanejo fiscal”.