Con la nueva ley agraria aprobada a fines del 2020, se buscó equiparar de forma progresiva el aporte de las empresas agroexportadoras a Essalud, pues antes de dicha norma venían pagando por 20 años una tasa de 4%, cuando en otros sectores productivos el aporte es de 9% sobre el sueldo básico.
Así, entre el 2021 y 2022, la tasa de aporte a Essalud en el sector agrario para las empresas de más de 100 trabajadores subió a 7% y para este año y el 2024 pasaba a 8%, mientras que para el 2025 llegaría al 9%, equiparándose a la regla general.
No obstante, este aporte a Essalud nuevamente bajará luego de haberse aprobado en el último pleno del Congreso —con 86 votos a favor— un texto sustitutorio que reduce a 6% el aporte mensual de las grandes agroexportadoras a partir del 2024 hasta el 2028.
Tras aprobarse el presupuesto público 2024, el Pleno siguió sesionando y pasadas las 4 de la tarde puso al debate el dictamen recaído en el proyecto del Ejecutivo y de otros parlamentarios que busca otorgar incentivos tributarios al sector textil y confecciones.
No obstante, el congresista Víctor Flores Ruíz, de Fuerza Popular, pidió que se incluya al sector agrario y así las empresas de este rubro también gocen de un incentivo tributario por contratar nuevo personal. Junto con ello, solicitó que se baje a 6% el aporte a Essalud hasta el 2028. Ambas solicitudes fueron incorporadas en el texto sustitutorio que finalmente se aprobó.
Ante ello, el congresista Carlos Anderson (no agrupado) advirtió que incluir beneficios al agro en un proyecto relacionado con los sectores textil y confecciones implica “insertarlo como de contrabando”.
“El tema que acaba de introducir el congresista Flores con relación al tema agrario es de una sustancia tan importante que me parece un poco peligroso insertarlo en el medio de un tema totalmente distinto que tiene que ver con el tema textil”, alertó el congresista.
En respuesta, César Revilla, presidente de la Comisión de Economía, acotó que el Ministerio de Economía dio el visto bueno al texto final aprobado.
Giorgio Balza, asociado principal de Cuatrecasas, indica que se está “promoviendo una menor carga laboral al empleador” para que se contrate más personal en este sector.
PUEDES VER: Cineplanet abrirá su cine más moderno en San Juan de Lurigancho: ¿cómo será y en dónde se ubicará?
Por su parte, el exviceministro de Empleo Fernando Cuadros explica que este bajo aporte implica menos ingresos para Essalud, lo cual afectaría aún más la calidad de los servicios que prestan a los trabajadores. Asimismo, señala que prácticamente las demás empresas, incluso mypes, van a terminar subsidiando a las grandes agroexportadoras.
“Una micro o pequeña empresa que aporta el 9% por cada trabajador va a terminar subsidiando a grandes agroexportadoras que van a aportar solo el 6%. Se les está financiando con una menor captación de recursos de Essalud”, añade.
La ahora autógrafa, que será remitida al Poder Ejecutivo para su promulgación, establece un crédito a favor del sector textil y confecciones que se puede aplicar contra el impuesto a la renta si la empresa reinvierte sus utilidades.
Vanessa Watanabe, socia del Área Tributaria de Payet, Rey, Cauvi, Pérez Abogados, indica que también se aumenta la tasa de depreciación a 33,33% por la compra de maquinaria entre el 2024 y 2025, y de 20% a partir del 2026 hasta el 2028.
En tanto, Giorgio Balza añade que las empresas textiles, de confecciones, de agro y riego, agroexportadoras y agroindustriales accederán a una deducción adicional por la contratación de nuevos trabajadores.
Carlos Anderson, congresista
“Debe votarse de manera separada, presentado como proyecto y discutirlo en la comisión de Economía. Acá hay gastos tributarios y me parece peligroso insertarlo como de contrabando”.