Para el primer trimestre del 2023, el 57,4% de la población de más de 18 años de edad accedió al sistema financiero a nivel nacional, lo que representa el mayor incremento registrado (15,2%) en los últimos años al compararlo con similar periodo de tiempo en el 2019, cuando alcanzó el 42,2%, informó el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) a través del Informe Técnico Condiciones de Vida en el Perú.
De acuerdo con Carolina Trivelli, economista e investigadora principal del Instituto de Estudios Peruanos (IEP), este es un avance “notable”, sobre todo al considerar que para el 2011 solamente el 21% tenía acceso, pero aún resulta altamente insuficiente.
Así, señaló que hay tres factores que han permitido una marcha veloz en el país: la pandemia, que mostró la importante de poder hacer transacciones remotas; los beneficios de los medios digitales, que permiten estar conectado con el sistema financiero sin tener que ir físicamente; y, finalmente, la expansión de agentes en distintas zonas del Perú, que dan la opción de realizar transacciones básicas, retiros, pago de servicios, envío de represas, entre otros.
Pese a esto, las diferencias entre la cobertura de la zona urbana y la rural siguen siendo graves: el 62,1% de adultos tiene acceso al sistema financiero en la capital, mientras que en provincias la cifra solo llega a la mitad: 35,6%.
“La población con menor acceso es la rural. Tiene que ver con la poca presencia del sistema, la mayor pobreza registrada, así como menores niveles de educación y conectividad. También son vulnerables los adultos mayores de 65 años debido a que las innovaciones les resultan complejas”, señaló Trivelli.
El informe anota también que el 32,7% de ciudadanos fuera de capital que cuenta solamente con educación secundaria tienen cuentas bancarias; para aquellos que tiene estudios universitarios, la cifra sube a 65%, mientras que en Lima este grupo alcanza el 85,2%.
La encuesta arroja, asimismo, una cifra alarmante: el 89% de la población que no tiene una cuenta bancaria considera que no posee ingresos suficientes para estar dentro del sistema. En tanto, el 4,7% señala que desconfía de los bancos y un 6,1% tiene otras razones.
En ese sentido, Trivelli indicó que las mujeres son las propensas a estimar que sus ingresos son escasos, además de ser más adversas a usar sistemas que les generan desconfianza. “En los estratos medios y altos, los hombres tienen en proporción más acceso”, refirió.
Pese al avance, para países con niveles de ingresos como los del Perú, deberíamos estar en 10 o 15 puntos adelante, apuntó la especialista.
El Perú se encuentra penúltimo, según el Índice de Inclusión Financiera (IFF) 2023 de Credicorp. Es así que se ubica por debajo de Panamá (54,6%), Chile (52,3%), Argentina (49,0%), Ecuador (48,9%), Colombia (44,7%) y México (41,5%).
Al respecto, para mejorar la inclusión se debe aumentar las capacidades y la educación financiera.
Además, los servicios deben adaptarse a las necesidades de las personas y ofrecer créditos hipotecarios para distintos tipos de clientes. Igualmente, el sistema debe expandirse fuera de Lima con la presencia de los cajeros corresponsales, agencias, entre otros.
Por último, debe construirse interfuncionamiento entre distintas ciudades del Perú. “La interoperabilidad entre Yape y Plin es un avance para el sistema, hay que asegurar que una vez que se ingresen los montos se puedan mover sin costos ni restricciones”, precisó Trivelli.
Avances. Perú pasó de tener 43% de adultos con cuenta bancaria en el 2017 a 57,4% en el 2023.
Tipos. El 52,6% de la población a nivel nacional mayor de 18 años tiene una cuenta de ahorro o cuenta sueldo. El 3,4% posee una cuenta a plazo fijo o corriente.
Datos. En la zona rural, el 91,3% de las personas que no están dentro del sistema consideran que no tienen recursos suficientes.