Gabriela Cerruti, portavoz del gobierno de Argentina, reveló este jueves que la presidencia de Alberto Fernández evalúa la creación de una Empresa Nacional de Alimentos para “ayudar a los pequeños y medianos productores” con el fin de que las verduras y hortalizas lleguen de manera “más económica” a los hogares.
Tras la tradicional conferencia que se brinda cada jueves en la Casa Rosada, la vocera descartó, no obstante, que ello implique una decisión de crear una institución para controlar los precios del mercado, según informó el diario La Nación.
“La posibilidad de una empresa de alimentos tiene que ver con ayudar a los productores pequeños y medianos en la producción de verduras frescas, que ya existen muchísimos y que saben que nosotros compramos a las diferentes cooperativas, a la UTEP, a los diferentes productores que llegan de las quintas. Hacer de esto un tema más masivo para que esas verduras y hortalizas lleguen de manera más barata y económica a los diferentes hogares”, manifestó.
En días en que Argentina debate la idoneidad del nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la nación sureña registró una inflación de 3,9% en enero, según lo publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
“El Gobierno está empeñado en ver de qué manera puede ayudar a los pequeños y medianos productores, porque así como en Misiones implementamos que los productores de yerba puedan acceder a tierra y mejor tecnología, es necesario hacerlo con productores de hortalizas y verduras, que son los precios que más inciden en la inflación”, remarcó Cerruti.
Evitó, además, reconocer los efectos que la escalada de los valores en las góndolas podría tener sobre el desempeño electoral del Frente de Todos.
“La inflación es un daño para cada argentino y argentina. El Gobierno no evalúa en términos políticos aquello que representa un problema para la población. Lo evalúa solucionar no porque le interesa en términos políticos, sino para mejorar la vida de la gente”, manifestó.
Por otra parte, mencionó las intenciones del Ejecutivo de segmentar los subsidios en las tarifas como algo que trasciende lo pautado con el FMI. Apuntó, también, contra aquellos que viven en “residencias y barrios lujosos”, pero que se quejan porque ya no recibirán sus boletas con aportes del Estado.
“Plantear con la misma convicción que no se le pueden sacar los subsidios a la electricidad a aquellos que no lo necesitan porque viven en una residencia lujosa, en un barrio lujoso, porque tienen un ingreso que les permite pagar determinados subsidios pero sí hay que bajar los planes sociales que sí los necesita determinada gente es una contradicción”, deslizó la vocera.