Agencias
El Tribunal de Justicia Europeo le dio la razón a Google en dos casos que generan precedente para el uso de la información en Internet.
El primero de ellos, relacionado al derecho al olvido. Diez años después de que se estableciera que los europeos pueden pedir que se eliminen resultados del buscador vinculados a su nombre, la justicia europea ha considerado que “un motor de búsqueda no está obligado a retirar los enlaces en todas las versiones”. Es decir, no puede hacerlo en todo el mundo; solo se limita a la Unión Europea.
El tribunal precisa que no se trata de un "derecho absoluto", sino que está sujeto al "principio de proporcionalidad". Con ello aclara que el respeto a la vida privada y la protección de datos debe guardar un equilibrio con la libertad de información.
El segundo caso está relacionado a una ley aprobada por Alemania en el 2013 que obliga a Google a pagar a los periódicos por el uso total o parcial de sus contenidos a modo de descripción de una página o imagen en el buscador.
El Tribunal de Justicia europeo ha concluido que esa ley no es aplicable porque no fue comunicada previamente a la Comisión Europea. Al no hacerlo, es viable “invocar su inaplicabilidad”.