El gobierno japonés declaró este martes el estado de emergencia en siete regiones del país, incluida Tokio, como medida contra la propagación del coronavirus. Ante este panorama, el comité organizador de los Juegos Olímpicos Tokio 2020 tomó la decisión de suspender la exposición de la llama olímpica.
Pese a que la exhibición se llevaba a cabo en la prefectura de Fukushima, no incluida en la declaratoria, los organizadores optaron por guardar la antorcha para evitar la aglomeración de personas. Japón ha tenido un incremento de casos en los últimos días, con lo cual ha alcanzado los 3872 infectados y 94 fallecidos.
“Al principio, queríamos mantener su exposición pública hasta finales de abril. Pero ante los recientes acontecimientos, hemos decidido apagarla”, declaró el portavoz del comité organizador de los Juegos Olímpicos, quien no precisó cuál será el lugar donde se guardará la llama.
Desde su llegada a tierras niponas, el fuego olímpico ha visto modificado su itinerario a causa del COVID-19. El recorrido que inicialmente se tenía planeado por todo el archipiélago quedó cancelado y se limitó su traslado a Fukushima, región más afectada por el terremoto y posterior tsunami en el 2011.
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Los propios Juegos sufrieron un cambio en su calendario. Luego de la presión ejercida por diversos atletas y organizaciones de todo el mundo, el Comité Olímpico Internacional (COI) accedió a posponer la realización del evento para el próximo año. Las nuevas fechas de la competencia serán del 23 de julio al 8 de agosto del 2021, aunque se mantendrá la denominación de "Tokio 2020″.
Con información de AFP