El 8 de octubre de de 1971, el sacerdote Óscar Aquino Pérez creó Los Toribianitos. Él era profesor en el colegio Externado Santo Toribio de Mogrovejo del Rímac cuando se le propuso conformar un coro y participar en un concurso organizado por la Cruz Roja. Cuando asumió dicho rol, pensó que la experiencia terminaría pronto, pero ganaron el certamen. Tras el triunfo, realizaron presentaciones en la televisión y publicaron discos en los que se incluyó los clásicos villancicos de Navidad que miles de peruanos aún escuchan.
Han pasado 51 años desde aquella experiencia y hoy, a sus 89 años, el sacerdote de la parroquia San Lorenzo sigue liderando el coro de Los Toribianitos. En todos estos años, ha visto pasar a miles de niños que cantaron los emblemáticos villancicos navideños y otros temas. ¿Qué lo motiva a seguir? Para Óscar Aquino, la música no es solo un conjunto de voces, instrumentos y sonidos, sino un medio de que las personas conozcan a Dios.
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Óscar Aquino Pérez nació en Matucana en una familia de 16 hermanos. Llegó a Lima muy joven e ingresó al Seminario de Santo Toribio de Mogrovejo. Antes que la música, su primer amor fue el fútbol. Jugaba de delantero e incluso llamó la atención del club Deportivo Municipal, cuyos directivos le invitaron a entrenar con él. Pero sus horarios de estudio imposibilitaron que dicha propuesta se concrete.
En el seminario se hizo amigo del reconocido compositor Leopoldo La Rosa. Según comentó a La República, el fallecido director de la Orquesta Sinfónica Nacional fue una enorme influencia para que se dedique a la música. “Él (La Rosa) me inculcaba a aprender el piano, pero no lo hacía por el deporte”, relató Aquino Pérez.
En quinto de media, su institución educativa adquirió un piano Hammond. Este órgano cautivó al fundador de Los Toribianitos, por lo que comenzó a tocar dicho instrumento. Gracias a su esfuerzo, fue nombrado organista del seminario. “La música me servía en la iglesia, pero nunca pensé en un coro”, reveló Aquino Pérez.
El párroco Óscar Aquino dirige el coro Los Toribianitos desde octubre de 1971. Foto: La República/Jeremías Querevalu
Posteriormente, ingresó al colegio Externado Santo Toribio de Mogrovejo del Rímac. En 1971, luego de 10 años de integrar dicha institución, la Cruz Roja organizó un concurso de coros. Su institución decidió participar y se le propuso preparar a los niños para el certamen. Obtuvieron el primer puesto. La noticia salió, junto con una fotografía, en un diario local, lo cual generó el interés de otros medios.
Tras el triunfo, el coro se disolvió temporalmente, pero a los pocos días un canal de televisión les invitó al set para que los entrevisten. Fue así que reunió a los niños y se presentaron por primera vez en la TV. Luego de ello, Aquino Pérez decidió hacer un disco para reunir fondos y ayudar a menores del hospital Sergio Bernales de Collique. Esa fue su primera publicación.
También se les propuso hacer un nuevo álbum. Esta vez se incluyó los clásicos villancicos de Navidad que aún escuchan miles de peruanos. Al principio, el coro llevaba el nombre del colegio en el que trabajaba. Pero se evaluó colocarle otra denominación para llegar a más personas.
“Me propusieron ponerle Los Toribianos. Pero pensé ‘todo al que sale del colegio les dicen así’. Y, como la mayoría eran chicos, en ese momento pensé ‘¿Y por qué no le ponemos mejor Los Toribianitos?’ Ahí comenzó esta especie de aventura”, relató el religioso Aquino.
El sacerdote Óscar Aquino aún dirige Los Toribianitos con 89 años de edad. Foto: La República/Jeremías Querevelaú
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Aquino Pérez contempla a la música como un medio para enseñar valores en la juventud. “Lo que más me preocupa es la formación de valores en los niños (...) Como sacerdote, pienso que, como este medio está funcionando (la música), por qué no seguir con ello”. Él dice que los discos y las presentaciones siempre buscan ayudar a los demás. “Se ha grabado para ayudar siempre a pensar que el amor verdadero debe ser extendido. Que suma. Como es la Navidad”, recalcó.
Con 89 años, Óscar Aquino continúa con el proyecto de Los Toribianitos. El coro ha cantado en centros penitenciarios, hospitales, provincias. Incluso frente al papa Juan Pablo II y al fallecido intérprete mexicano Juan Gabriel. De todo su repertorio, las canciones “Canta, ríe y bebe”, “Ronda de Navidad”, “Cholito Jesús”, “Arbolito, arbolito” son algunas de las que más suenan en los hogares peruanos.
Aquino Pérez también impulsó la creación de la Asociación Los Toribianitos, que está integrada por exmiembros del coro que buscan ayudar al proyecto para que los nuevos niños puedan tener las facilidades de seguir cantando. Si bien el sacerdote desea cantar en más lugares y ayudar a más proyectos sociales, es consciente que a veces no se cuenta con suficientes fondos para ello.
El sacerdote Aquilino Pérez ha recibido la Medalla del Vaticano y la Orden de Palmas Magisteriales por su trayectoria y trabajo con Los Toribianitos. Foto: La República/Jeremías Querevalú
Hasta 2010, el coro formaba parte del colegio Externado Santo Toribio de Mogrovejo, pero tras el cierre de dicha institución, el proyecto, junto con el sacerdote, fue trasladado a la parroquia San Lorenzo del Rímac. Actualmente, los niños que desean pueden unirse al coro, ya que ellos siguen realizando presentaciones en diferentes eventos que tienen como finalidad ayudar a las personas o promover causas sociales.
Por su labor, el monseñor Aquino Pérez ha recibido la Medalla del Vaticano. Asimismo, se la ha otorgado la Orden de las Palmas Magisteriales del Estado peruano por su contribución a la educación y promoción de valores en el Perú.