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¿Qué significan las jergas “mano” o “mana” en Perú y cuándo se utilizan?

En los últimos años, las jergas “mano” y “mana” se han hecho muy populares en nuestro país. Te contamos qué significan y de dónde provienen.

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Las jergas "mano" y "mana" se han vuelto muy populares en Perú durante el último año. Foto: PEXELS

A lo largo de los años, el vocabulario español se ha extendido gracias a las diversas formas de hablar de cada región. Tan solo veamos el caso de Perú, donde día a día nacen nuevas jergas, entre las que se encuentran “mano” y “mana”.

Como estas últimas jergas son más ‘modernas’ a comparación de otras, como ‘palta’, ‘causa’ o ‘jato’, te contaremos a continuación qué significan y por qué son tan populares entre los jóvenes peruanos.

¿Qué significa “mano”, según la RAE?

“Mano” es una parte del cuerpo humano que está unida al antebrazo. Sin embargo, esta palabra se ha popularizado en los últimos años en México y no exactamente para referirse a esta extremidad. Por ello, la misma Real Academia Española (RAE) ha decidido pronunciarse sobre su significado.

Según el Diccionario panhispánico de dudas de la RAE, la definición proviene del país mexicano:

Así es la definición de 'mano' según la Real Academia Española. Foto: RAE

“Mano (en diminutivo ‘manito’) es acortamiento de hermano, usado, aunque cada vez con menos frecuencia, como tratamiento de confianza entre hombres”, se lee en la publicación de la RAE.

¿Qué significa “mano” en Perú?

En nuestro país, la palabra “mano” o “mana”, al igual que en México, se utiliza para referirse a un amigo o amiga, ya que también lo han tomado como un diminutivo de hermano y hermana.

Este término suele ser más usado por los jóvenes en las redes sociales y aplicativos de mensajería, como WhatsApp o Telegram, ya que en estas plataformas las conversaciones son más amenas y la comunicación es coloquial.

  • No quiero saber nada de ella, mano. Es mejor que estemos alejados.
  • Tranquilo, manito. Ya terminó todo.
  • Si él te valorara, no te trataría de esa forma, mana.
  • ¡Cálmate, mano! Si continúas así, podrías meterte en problemas.