La Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (Agtsyp) ha anunciado un paro de actividades, en respuesta a la muerte de un compañero por exposición al asbesto. Las medidas afectarán a todas las líneas del subte, aunque se realizarán en horarios que minimicen el impacto en los usuarios.
El cese de actividades será rotativo, con paros de dos horas en las líneas A, B, C, D, E, H y Premetro. Esta decisión se toma en un contexto de creciente preocupación por la salud de los trabajadores, tras el fallecimiento de Jorge Navarro, quien padeció cáncer de pulmón debido a la exposición a este material prohibido en Argentina desde 2003.
Documento oficial anunciando el paro de transporte. Foto: Metrodelegados
El paro de subtes no se llevará a cabo el martes 19 de noviembre, sino miércoles 20, con un esquema de paralización que afectará a las siguientes líneas:
La decisión de realizar este paro se origina en la muerte de Jorge Navarro, un trabajador que formaba parte de un grupo de 107 empleados afectados por el asbesto. La Agtsyp ha denunciado que, a pesar de la prohibición del uso de este material, muchos trabajadores han estado expuestos sin ser informados adecuadamente. En su comunicado, el gremio subraya que la muerte de Navarro podría haberse evitado si se hubieran tomado las medidas necesarias a tiempo.
Los metrodelegados han exigido a las autoridades un cambio urgente en las flotas que contienen amianto, así como la implementación de un plan de vigilancia médica para todos los trabajadores, incluyendo a aquellos que ya están jubilados. La Agtsyp ha manifestado que el período de latencia de enfermedades relacionadas con el asbesto puede ser de varias décadas, lo que hace aún más urgente la atención a esta problemática.
Emova, la empresa concesionaria de los subtes, ha respondido a la medida de los trabajadores lamentando el fallecimiento de Navarro. En su comunicado, la empresa destacó el trabajo de la mesa interdisciplinaria encargada del Plan de Desasbestizado, asegurando que se han realizado más de 3000 mediciones sobre la calidad del aire en las áreas de trabajo del subte, con resultados considerados adecuados para la salud.
La situación actual pone de manifiesto la necesidad de un diálogo efectivo entre las autoridades y los trabajadores para garantizar un ambiente laboral seguro y saludable.