Por: Carlos Páucar
Un 2020 que nadie se esperaba. El nuevo coronavirus ha quitado la vida a miles. No solo con quienes batallaron en primera línea contra la epidemia. También lo hizo con literatos, músicos, deportistas, científicos, cineastas, humoristas... La epidemia no ha tenido reparos en hacer temblar al planeta.
Se extrañará, por ejemplo, a un héroe del humor, Marcos Mundstock, emblema del grupo argentino Les Luthiers, quien falleció el 22 de abril, a los 77 años. Carismático, empeñado en mejorarnos la existencia a punta de palabras y con su peculiar voz, sus silencios, frases e inflexiones. El coronavirus nos arrebató su ingenio profundo, en Buenos Aires.
La pandemia también se llevó al autor de Un viejo que leía novelas de amor. El escritor chileno Luis Sepúlveda. A este hijo de militante del partido comunista chileno y enfermera de origen mapuche no lo venció el dictador Pinochet (estuvo preso dos años y medio), ni su exilio en Uruguay, Brasil, Paraguay y Alemania. Pero sí lo hizo el Covid-19. El bicho mortal lo acabó el 16 de abril en Asturias.
El virus igual acabó con uno de los historietistas más venerados por sus trabajos fantásticos, sus mundos personalísimos en la ciencia ficción y sus personajes posapocalípticos. El mendocino Juan Giménez, dibujante de Cuestión de tiempo, La estrella negra, Cuarto poder, La casta de los Metabarones, falleció en el hospital central de su ciudad natal, el 22 de marzo a los 76 años. En 1984, fue considerado el “mejor dibujante del mundo” en Barcelona.
La música tampoco eludió al virus letal. A los 86 años murió Manu Dibango, ícono del jazz africano que tuvo gran influencia entre los jóvenes latinos de Nueva York, creadores de lo que luego se llamaría salsa, en el corazón de los Estados Unidos. El saxofonista, quien falleció en París, fusionaba jazz, funk y música tradicional de Camerún. Fue parte de los conciertos de Fania All Stars, hizo el disco ‘Cubáfrica’ con Eliades Ochoa, y se le recuerda por su creación ‘Soul Makossa’, usada por Michael Jackson en su álbum ‘Thriller’.
También se nos fue el patriarca de una descendencia enorme para el jazz, Ellis Marsalis. Este pianista, leyenda del jazz de Nueva Orleans, padre de los músicos Wynton y Branford, Delfeayo y Jason Marsalis, fue otra víctima del virus, el 10 de abril, a los 85 años. “Mi padre era un gigante en la música y la enseñanza, pero un padre aún mayor”, dijo Branford. “Ellis Marsalis, 1934-2020. Murió mientras vivía: aceptando la realidad”, tuiteó Wynton, despidiendo a Ellis, una de las grandes figuras del jazz moderno.
En Estados Unidos también dolió la ida de Terrence McNally (81), el 24 de marzo. El escritor ganó nada menos que 5 premios Tony y un Emmy en su prolífica carrera como dramaturgo, libretista musical y guionista. Escribió, entre muchas obras de teatro, la adaptación de El beso de la mujer araña (1990).
En Italia y España se sintió particularmente la partida de Lucía Bosé (89), actriz italiana dirigida por directores de la talla de Michelangelo Antonioni y Luis Buñuel. Tuvo dos hijos con el torero español Luis Miguel Dominguín: la actriz Paola Dominguín y el popular Miguel Bosé. “Te llevamos dentro en el corazón querida mami”, le dedicó el famoso cantante pop el día que partió, el 23 de marzo.
También murió en Manhattan, el 17 de abril, la apasionada arqueóloga Iris Love (86), quien en 1969 descubrió uno de los sitios más esquivos de la historia antigua, el templo de Afrodita, en la costa suroeste de Turquía. Se había convertido en sus últimos años en una fascinada criadora de perros salchicha, tenía cerca de 40 mascotas.
Una de las partidas que más conmocionó fue la del joven médico chino Li Wenliang (33). El primero en advertir al mundo sobre el coronavirus en Wuhan. En una red social, Li alertó el 30 de diciembre sobre los 7 primeros casos reportados en el mercado de Huanan. De nada sirvió su acto de valor, fue silenciado por la policía. Halló la muerte el pasado 7 de febrero.
El cine recibió duros impactos. Murieron Andrew Jack (76), actor de Star Wars; Mark Blum (69), quien actuó en películas como Cocodrilo Dundee; el cineasta chino Chang Kai (55) y la actriz Lee Fierro (91), conocida por su rol de madre de la segunda víctima en Tiburón (1975).
Otros músicos fallecidos: Lee Konitz (92), saxofonista de jazz; Wallace Roney (59), principal discípulo vivo de Miles Davis; John Prine (73), músico de country; y Adam Schlesinger, ganador de un Emmy. Otra víctima fue el británico John Horton Conway, llamado “el matemático más mágico del mundo” por sus aportes científicos; Vittorio Gregotti, famoso arquitecto italiano; Allen Daviau, el director de foto en E. T.; el Dr. John Murray, entre otros.