Tener recuerdos a largo plazo podría tener efectos negativos en los componentes del cerebro, según un informe de la revista Nature. La investigación sugiere que el proceso de formación de la memoria puede provocar inflamación cerebral y dañar el ciclo de reparación del ADN en las neuronas.
Para analizar en detalle el proceso de creación de recuerdos, la Escuela de Medicina Albert Einstein realizó un estudio en ratones. Los científicos buscaron que los roedores, al ser sometidos a pequeñas descargas eléctricas, crearan un episodio mental del hecho.
Tras analizar el daño de las neuronas en el hipocampo, se descubrió la activación de genes que participan en el proceso de la inflamación cerebral.
Cada vez que una persona tiene actividad cerebral, ocasiona pequeñas roturas en el ADN de las células nerviosas. En otras palabras, cada vez que recuerdas algo, tus neuronas se ven afectadas. Sin embargo, estas se recuperan a nivel celular gracias a la proteína TLR9.
En la investigación con los ratones, luego de las descargas eléctricas, se mostró la aparición del receptor tipo peaje 9 (TLR9). En un principio, los investigadores dedujeron que la aparición del gen se debía a una respuesta del sistema inmune del animal. Al analizar con detalle, notaron que el TLR9 se activaba en los grupos celulares del hipocampo.
Para la reparación celular de las neuronas es importante contar con la proteína TLR9. Esta vía puede trabajar a través de respuestas inflamatorias. Esto explica la inflamación de nuestro cerebro, ya que, a pesar de que las células neuronales se encuentran en todo nuestro sistema nervioso, radican principalmente en la estructura cerebral.
PUEDES VER: Conoce el 'árbol de la muerte', el más peligroso del mundo: uno de sus frutos puede matar a 20 personas
El gen TLR9 participa en la reparación celular de las neuronas. Foto: Pixabay
Cada vez que pongas en actividad al cerebro, especialmente al crear recuerdos, las neuronas tendrán repercusiones a nivel celular. Pese a que esto pueda sonar como algo negativo, gracias a la memoria tenemos aptitudes como la inteligencia y la capacidad de tener fotografías en nuestro cerebro. Además, gracias al sistema inmune del cuerpo humano, las células de las neuronas se pueden reparar.
Jelena Radulovic, neurocientífica y coautora de la investigación, señaló estar sorprendida al analizar el cambio a nivel celular de los ratones. Mientras se analizaba el proceso inflamatorio cerebral, se registró que las neuronas se volvieron más resistentes a estímulos ambientales nuevos o similares. Por lo tanto, en una investigación futura, se podría analizar si estas se vuelven más fuertes luego de ser dañadas. "Esto es digno de mención", señaló Radulovic.
El almacenamiento de recuerdos y, por ende, la creación de la memoria, se originan en el hipocampo. Esta estructura, ubicada en el lóbulo temporal de nuestro cerebro, está relacionada con los procesos de recepción de información tanto de seres humanos como en animales. Un informe de la revista Journal of Neuroscience señala que mediante la actividad eléctrica cerebral, tenemos la capacidad de asociar y repetir imágenes, recordar tareas específicas y procesar información.
El hipocampo es la región cerebral donde se almacenan los recuerdos. Foto: Pixabay
“Dicho de otra forma, observando la señal registrada en el hipocampo, sin observar al individuo, podemos conocer la acción que este está desarrollando en ese momento”, señala José María Delgado, autor del artículo científico.