Los varanos sin orejas son reptiles únicos en su especie ya que su brillante piel escamosa y su naturaleza carnívora da la sensación de que se trataran de dragones, las gigantescas bestias de los cuentos de fantasía. Sin embargo, como solo se han encontrado especímenes en Borneo, isla del sudeste asiático, y siempre viven bajo tierra (solo salen a cazar durante las noches), estas criaturas todavía son poco conocidos por la comunidad científica.
En esta nota te contamos más detalles sobre estas criaturas, consideradas el 'santo grial' dentro de la herpetología, la rama de la ciencia que estudia a los reptiles.
Los varanos sin orejas pueden ser encontrados en rocas cercanas a arroyos. Foto: Petr Hamerník
El varano sin orejas, de nombre científico Lanthonotus borneensis, es la única especie de la familia Lanthanotidae, creada especialmente para ellos por sus singulares características, hace 83 años, de acuerdo a un estudio publicado en la revista Gazella, del Zoológico de Praga.
En la herpetología, son considerados el ‘santo grial’ de los reptiles, debido a que los científicos no han hallado ningún espécimen parecido. Se considera que tienen un ancestro común con los lagartos hace 145 a 66 millones de años.
Los varanos sin orejas pueden llegar a crecer hasta 50 cm, su cuerpo es alargado, de extremidades cortas, garras afiladas en las patas y una cola prensil. Sus ojos son pequeños y sus párpados inferiores son translúcidos.
Las escamas de su dorso son de tonalidad marrón y brillante, en forma de quillas, lo que les da un aspecto similar a los cocodrilos. Además, sus dientes son muy afilados.
Por la tonalidad de sus escamas, estos reptiles se camuflan fácilmente. Foto: Petr Hamerník
Investigaciones recientes señalan que tienen glándulas venenosas mandibulares, aunque en bibliografía más antigua no se daba a conocer este rasgo, según se indica en la publicación mencionada anteriormente.
Respecto a sus orejas, la abertura de su oído externo no está desarrollada, característica que le da nombre.
Se estima que estas criaturas tienen débil capacidad auditiva. Foto: Petr Hamerník
Se conoce muy poco acerca de su comportamiento en estado salvaje, según Animal Diversity Web, portal especializado de la Universidad de Michigan. Los especímenes en cautiverio que han sido estudiados se muestran bastante letárgicos, aunque a veces luchan cuando son manipulados, se indica.
A mediados del siglo XX, se consideraba que los varanos sin orejas estaban al borde de la extinción porque no se lograban conseguir muchos de su tipo. Sin embargo, recientemente, se ha considerado que puede haber más, pero son difíciles de observar en la naturaleza, debido a sus características.