Un equipo de científicos de la Universidad de Shanghái sugieren que el sentido del olfato del hombre moderno y de otros primates se ha estado deteriorando gradualmente durante el curso de la evolución.
En dicha investigación, publicada en PLOS Genetics, el equipo de biólogos y genetistas pretendía averiguar cómo se relacionan las distintas percepciones de olor con la gran variedad de receptores olfativos y la genética particular de cada persona.
Los seres humanos disponemos aproximadamente 400 receptores olfativos que nos permiten detectar una gran variedad de olores específicos o que también pueden permanecer disfuncionales. Tal cantidad de receptores hace que las combinaciones varíen enormemente de unas personas a otras y sean distintas a través de las generaciones.
PUEDES VER: Dosis diseñada contra ómicron no protege más que las vacunas originales, sugiere estudio preliminar
En el estudio, los científicos congregaron a dos grupos de control de diferentes grupos étnicos para evaluarlos a partir de la intensidad y el placer con la que percibían 10 aromas.
Por un lado, reclutaron a 1.000 voluntarios chinos pertenecientes a la etnia Han. Este grupo étnico es el más numeroso en el país y fue elegido para la muestra, ya que informes anteriores de la misma naturaleza tenían un gran sesgo occidental. El otro grupo, por otro lado, fue compuesto por 364 personas étnicamente diversas de Nueva York, en Estados Unidos.
De todos los participantes, que oscilaban los 18 y 55 años, ninguno padecía de condiciones médicas que repercutieran el sentido del olfato como tabaquismo, enfermedades neurológicas o alguna operación en la nariz.
Luego de las pruebas, los científicos se detuvieron en dos nuevos receptores de olor: uno que detecta un almizcle sintético utilizado en fragancias y otro que percibe un componente de hedor humano. El motivo de su interés fue que las mutaciones de los genes correspondientes a tales receptores olfativos provocaban una percepción de mayor o menor sensibilidad.
“Tras resumir toda la variación genética publicada, encontramos que las personas con versiones ancestrales de los receptores tienden a calificar el olor correspondiente como más intenso”, señalaron los autores, quienes sostuvieron que era prueba de un deterioro de la capacidad sensorial.
No obstante, otros autores sostienen que el supuesto deterioro del sentido del olfato es solo una teoría más en la ciencia o incluso un mito.
Según un artículo publicado en Science el 2017 y escrito por el neurocientífico John McGann, pese a que los humanos y otros primates poseen menos genes olfativos que otros mamíferos, el sentido del olfato del hombre puede ser más agudo de lo que creemos.
En esa misma línea, McGann sostuvo ante The Atlantic que una muestra del buen sentido del olfato humano se puede observar mejor en algunos pueblos del mundo como Jahai (Malasia) y Maniq (Tailandia).