Fernando Carrasco. Lenin Heredia Mimbela (Piura, 1987) pertenece a una nueva hornada de jóvenes narradores que han hecho su aparición, recientemente, en nuestra literatura. Heredia, egresado de las aulas sanmarquinas, acaba de publicar el libro de cuentos La vida inevitable (Paracaídas editores). Los siete cuentos del volumen, de extensiones bastante disímiles, desarrollan temas variados como las relaciones amorosas conflictivas, la muerte inexorable y la violencia juvenil. En “Inés y las noticias” se explora el tema amoroso. La presencia tangible y agobiante de la muerte hace reflexionar a los protagonistas de los cuentos “Bajo la lluvia” y “Los ángeles están listos para volar”, el más extenso del libro. “Rudos” es otro de los cuentos significativos, donde la sed de venganza conduce a un grupo de jóvenes a la realización de un brutal asesinato. Cabe destacar también aquí el uso eficiente de la jerga juvenil. La mayoría de historias se ambientan en la calurosa ciudad de Piura, una Piura de nuestros días, tan distinta de la representada por autores canónicos como Miguel Gutiérrez y Vargas Llosa. Llama la atención la solvencia narrativa de Heredia, quien muestra un lenguaje bien cuidado y despliega una serie de estructuras y estrategias narrativas con acierto. Para una nueva edición habría que corregir algunos errores mínimos de redacción y pulir ciertas expresiones que resultan deslucidas. La vida inevitable de Lenin Heredia es un libro que se defiende por sí solo. No requiere de un coro adulador de amigos para ser considerado un buen trabajo creativo.