Crueldad. Se desploma versión de que elizabeth espino fue manipulada por su novio. Después de interrogar a todos los implicados en el asesinato de Elizabeth Vásquez la División de Homicidios reconstruyó minuto a minuto lo sucedido. Doris Aguirre. Sin escrúpulos. La estudiante universitaria Elizabeth Espino Vásquez facilitó hasta el último detalle a Fernando González Asenjo y a Jorge Cornejo Ruiz para que cumplieran con la sangrienta faena de acabar con la vida de la letrada Elizabeth Vásquez Marín, de acuerdo con la policía que armó el rompecabezas de los hechos. Según los agentes de la División de Homicidios de la Dirincri, Elizabeth Espino en ningún momento dudó en la ejecución del plan, por lo que descartan que haya actuado bajo la influencia de su novio. Los hechos hablan por sí solos. 26 de enero, 8.20 pm. Elizabeth Espino baja al primer piso del edificio donde vive y le pide al vigilante Santos Bartolo Baylón que le compre pastillas porque tenía cólicos menstruales. Al ausentarse Bartolo, ella avisa a su pareja Fernando González y a Jorge Cornejo que suban al piso 13. Acompañados por la estudiante, quien les franquea el acceso, los criminales llegan por el ascensor a la segunda planta del dúplex, luego bajan y se ocultan en el dormitorio de la víctima, ubicado en el primer nivel. 8.30 pm. Elizabeth baja nuevamente al puesto de vigilancia para esperar a Bartolo con las pastillas y se despide. 8.40. pm. Elizabeth llama a su madre, quien se encontraba en su oficina de San Isidro, y le dice que asistirá, junto con la empleada, a la iglesia mormona de este distrito. También le manifiesta que después pasará por ella a su oficina. Rumbo a la muerte 10.30 pm. Elizabeth Vásquez Marín llega en su auto al edificio donde vive e ingresa a la cochera. Está acompañada por su hija Elizabeth y de la empleada María Liliana Huamán. Las tres suben por el ascensor al apartamento. El dúplex de la abogada se divide en dos niveles: en el primero se hallan los dormitorios de la abogada y de su hija Elizabeth. También hay otras habitaciones, una sala de estar y dos baños. En la segunda planta, que es la única que tiene acceso al ascensor, está el comedor, la cocina, la lavandería y el dormitorio de la empleada. Una vez en el departamento, la abogada se dirige a su dormitorio, mientras que su hija Elizabeth y la empleada van a la cocina. La joven enciende el televisor con volumen alto, mientras la doméstica prepara un jugo para la abogada. Pero la hija le dice que ella se lo va a servir. Y la envía a dormir. El momento fatal 10.35 pm. Cuando la abogada ingresa a su dormitorio es sujetada por el cuello por Fernando González, quien se encontraba escondido detrás de la puerta, junto con Jorge Cornejo. Se produce un forcejeo y en esos precisos momentos suena el celular de la abogada, quien intenta pedir ayuda. Era una amiga, que luego contó a la policía que había hecho la llamada y que logró escuchar un grito desesperado, pero la comunicación se cortó de golpe. Golpeada brutalmente En ese instante, Jorge se abalanza contra la indefensa mujer y le arrebata el celular. Ella consigue morderle la mano, y es allí cuando Fernando la coge de los pelos y golpea su cabeza repetidas veces contra el filo de la cama. 10.40 pm. Ella cae al piso ensangrentada, trata de defenderse todavía, pero finalmente es estrangulada por Fernando con sus propias manos. Mientras tanto, la amiga que había llamado insiste en comunicarse, pero esta vez timbra el número fijo de la casa. Elizabeth Espino contesta y le dice que su mamá estaba en la ducha. Mentía. En realidad, la estaban matando en su dormitorio. 10.55 pm. Una vez consumado el asesinato, Fernando y Jorge envuelven el cadáver de la abogada en una sábana. Elizabeth los ayuda a subir el cuerpo al segundo nivel y salir por el ascensor. 2.15 de la madrugada del 27 de enero. Elizabeth baja nuevamente a la caseta de vigilancia y convence a Santos Bartolo para que compre dos sánguches en el restaurante ”Mi Carcochita”. Éste se ausenta por 20 minutos, espacio en el que los criminales bajan el cadáver y lo introducen en la maletera del Daewoo de la víctima. 2.35 am. Santos regresa y Elizabeth le dice que abra la cochera porque su mamá iba a regresar a su oficina para recoger documentos olvidados. Santos accede, sin percatarse de quiénes eran los ocupantes del vehículo. 3.15 am. Fernando González hace una llamada desde el celular de la abogada al teléfono de Elizabeth Espino para comunicarle que ya habían abandonado el Daewoo con el cadáver. Claves Se acusan. En el interrogatorio, Elizabeth Espino acusó a su novio Fernando de haber tramado todo para matar a su madre. Sin embargo, González dice que ella fue quien planificó el asesinato de la abogada. Evidencia. Las sábanas con sangre fueron arrojadas dentro de una bolsa en el Mercado Las Flores, en Barranco.