Muere anciano indigente que vivía con turista bajo el puente Belén en Cusco
Pese a la solidaridad de una mujer británica y el tardío auxilio de las autoridades, el adulto mayor falleció tras ser internado en un centro gerontológico. Su identidad es un misterio.
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La mañana de este jueves se confirmó el fallecimiento de un adulto mayor que vivía en situación de calle bajo el puente Belén, en la ciudad del Cusco. Su historia, marcada por la indigencia y la indiferencia, conmovió a muchos luego de que fuera visto acompañado de una turista británica que se convirtió en su inesperado sostén durante los últimos días de su vida.
El anciano, cuya identidad permanece desconocida, fue captado semanas atrás junto a Hannah Joanne Almond, una joven extranjera en aparente situación de indigencia. Juntos compartían un improvisado refugio hecho de frazadas y cartones en la avenida Ejército.
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Una historia de abandono y humanidad
La imagen de la turista curando sus heridas y compartiendo sus alimentos evidenció una solidaridad que contrastaba con el abandono social que el hombre venía sufriendo por años.
El pasado jueves, comerciantes de la zona desalojaron a la extranjera y al desamparado anciano, quemando incluso sus pocas pertenencias. La situación generó indignación en la población y forzó la intervención de los serenos de la Municipalidad del Cusco, quienes gestionaron sin éxito su ingreso a diversos albergues. Finalmente, fue la Federación Agraria Tupac Amaru de Cusco (Fartac) la que le ofreció un espacio temporal.
Luego de una semana en coordinación con la Defensoría del Pueblo, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, y la Beneficencia Pública de Cusco, se logró su internamiento en el Centro Gerontológico San Francisco de Asís, en el barrio de La Recoleta. Sin embargo, menos de 24 horas después, se comunicó su lamentable fallecimiento. La causa de su muerte aún se encuentra bajo investigación.
El asesor legal de la Beneficencia de Cusco, Henry Gonzales, confirmó la noticia y manifestó que se siguen los protocolos correspondientes con la Policía y el Ministerio Público.
Lamentablemente el caso del longevo indigente salió a la luz únicamente tras la presencia de una extranjera que, por un breve periodo, se convirtió en su compañía y su único sostén.
La historia de este hombre revela no solo la cruda realidad de muchos adultos mayores en situación de calle, sino también la ausencia de respuestas efectivas y oportunas de parte de la sociedad y el Estado.
