Sociedad

Crimen organizado genera pérdidas mayores a S/150 millones en Arequipa: ciudadanía piden acción de autoridades

El presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Arequipa, Julio Cáceres Arce, pide el respaldo de todos los ciudadanos para revertir índice de criminalidad en la región, el mismo que genera mucha preocupación.

La región de Arequipa es la tercera con mayor índice de criminalidad. Foto: Composición LR/Andina
La región de Arequipa es la tercera con mayor índice de criminalidad. Foto: Composición LR/Andina

La creciente ola de delincuencia, ocasionada en su mayoría por el crimen organizado, en Arequipa ha puesto en vilo a la ciudadanía y autoridades en la región, quienes advierten que este mal podría aumentar a niveles incontrolables de no tomar acciones oportunamente. La problemática incluso ha sido resaltada por las grandes pérdidas que genera la inseguridad para miles de arequipeños.

De esta manera, La República se comunicó con Julio Cáceres Arce, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Arequipa (CCIA), quien aseguró que empresarios no “pueden ser ajenos al problema de la delincuencia”. Según información brindada por especialistas, la región de Arequipa pierde alrededor de S/150 millones cada año a causa del crimen organizado.

Julio Cáceres Arce, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Arequipa (CCIA). Foto: Prensa Julio Cáceres

Julio Cáceres Arce, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Arequipa (CCIA). Foto: Prensa Julio Cáceres

Crimen organizado pone en riesgo el crecimiento de Arequipa

Tal y como lo asegura Cáceres Arce sobre el peligro que provoca la delincuencia en Arequipa, los empresarios de las diferentes partes de la región no pueden ser ajenos al problema que se atraviesa. El representante de la CCIA enfatiza en la necesidad de que se involucren todos en la lucha contra la inseguridad ciudadana.

“Arequipa pide una acción de todas sus partes, autoridades, empresarios y ciudadanía”, afirmó, para resaltar que la seguridad es fundamental para el desarrollo y bienestar de Arequipa. Incluso Cáceres exigió que la comunidad debería cumplir un rol importante en la lucha contra la delincuencia, esto al ser parte del primer mecanismo de defensa ante actos de criminalidad.

Crimen organizado en Arequipa incrementa con el pasar de los años desde 2019. Foto: Difusión

Crimen organizado en Arequipa incrementa con el pasar de los años desde 2019. Foto: Difusión

Delincuencia provoca pérdidas millonarias todos los años a arequipeños

Al ser consultado sobre los costosos daños que se generan en torno al incremento de los casos por extorsión, Cáceres Arce resaltó que son 23 las empresas de constructoras e inmobiliarias que denunciaron haber perdido alrededor de S/150 millones en un año. Este dato refleja el impacto negativo que tienen los crímenes en la región. “La población se siente en peligro de ser asaltada o extorsionada”, agregó.

Precisamente sobre el miedo en la población, el presidente de la CCIA aseguró que, existe cierto temor entre los pequeños comerciantes que sufren de extorsión en Arequipa, ya sea por las represalias y por la nula acción de las autoridades. “La fiscalía debe actuar de manera correcta, los criminales no pueden salir de la noche a la mañana y seguir cometiendo delitos”, sentenció Cáceres.

Se logró conocer que, cerca del 40% de la población ha sido víctima de algún delito, cifra que supera el promedio nacional de 27%. Esta realidad ha generado un clima de desconfianza hacia las autoridades, ya que solo 21 de cada 100 personas se sienten seguras con la acción de la policía, según fuentes locales. Asimismo, Julio Cáceres Arce asegura que, aunque no se han recibido denuncias formales de extorsión, existen testimonios de microempresarios que afirman ser acosados por bandas extranjeras.

Especialistas mostraron preocupación por aumento de criminalidad en Arequipa. Foto: La República

Especialistas mostraron preocupación por aumento de criminalidad en Arequipa. Foto: La República

Alianza entre empresarios y la PNP por la seguridad en Arequipa

Ante esta lamentable situación, Cáceres Arce hizo un llamado a los empresarios para que tomen conciencia y se involucren en la creación de un entorno más seguro. Por su parte, la CCIA ha comenzado a trabajar en coordinación con la Región Policial Arequipa, enfocándose en capacitaciones para los efectivos policiales. “Queremos contribuir a la mejor preparación de los agentes y ayudar a la ejecución de su importante labor”, afirmó, para destacar la necesidad de que la policía recupere la confianza de la ciudadanía.

El presidente de la CCIA también subrayó que los equipos de serenazgo y la policía requieren mayor apoyo para combatir la delincuencia de manera efectiva. “La situación nos obliga a los empresarios a involucrarnos en el objetivo de hacer que Arequipa sea una región más segura”, reiteró, para hacer énfasis que cada ciudadano tiene un papel valioso en este esfuerzo colectivo.

Fiscalía de Arequipa intensifica lucha contra crimen organizado

La fallida construcción del Centro Penitenciario de Socabaya, en Arequipa, es un claro ejemplo del ataque del crimen organizado, el cual ha generado pérdidas superiores a los 18 millones de soles en apenas siete meses (mayo a noviembre de 2019). Según la investigación fiscal, la organización criminal ‘Ladrillo Sindical del Sur’ paralizó la obra a través de extorsión y violencia, para afectar directamente a los 800 trabajadores.

Declaraciones de Lucar Cabanillas, jefe de supervisión de la obra del Penal de Socabaya, revelaron que solo el 40% del personal trabajaba, mientras el resto sufría amedrentamientos que reducían su productividad. Este esquema incluyó pagos a trabajadores fantasma y cuotas sindicales. 

Sin embargo, la fiscal Rosmery Mendoza Palomino lidera la lucha frontal contra esta red criminal. Ha presentado una acusación formal contra los cabecillas José Luis Chapa Díaz y Andrés Saya Alarcón, para solicitar penas de entre 15 y 25 años de prisión por extorsión agravada y organización criminal. Las audiencias clave iniciarán en los próximos días y marcarán un paso decisivo en el combate al crimen organizado.