Sociedad

Julio inicia con más frío en Perú: conoce el pronóstico del clima y temperaturas en costa, sierra y selva

¡A sacar los abrigos más gruesos! El Senamhi pronostica que este inicio de julio la costa, sierra y selva van a ser afectadas por temperaturas muy bajas, solo Puno alcanzará los -14° C.

El frío en julio se intensificará, predice Senamhi. Foto: composición LR/Andina.
El frío en julio se intensificará, predice Senamhi. Foto: composición LR/Andina.

Cada vez nos adentramos más en la estación del invierno y nuestro cuerpo lo siente: en la costa, la humedad casi llega al 100%; en la sierra ha iniciado la temporada de granizo y fuertes vientos; y en la selva las temperaturas han llegado hasta 13°C en pleno friaje. El Senamhi apunta que este mes estará lleno de fenómenos meteorológicos que a muchos puede agarrar desprevenidos.

Entre estos fenómenos, podemos contar con los vórtices costeros en la costa central y sur del Perú; también el efecto DANA Héctor en la sierra; y el sexto friaje de lo que va del año en la selva. Todos estos fenómenos que se aglomeran en pleno invierno e iniciando julio, nos dicen lo duro que serán las condiciones en el desarrollo del mes.

Por ello, el Senamhi realiza evaluaciones todas las semanas para poder publicar avisos meteorológicos que nos puedan ayudar a entender y, sobre todo, prevenir cualquier daño ante futuros siniestros de la naturaleza.

Pronóstico en costa, sierra y selva

Sierra

En la actualidad, hay una alerta vigente para la sierra sur del Perú, que afectará tanto a Puno como a Arequipa, Cusco o Moquegua. El Senamhi predice vientos fuertes y una mayor visibilidad del cielo, pero un descenso de la temperatura en las noches que llegaría hasta los -14° C.

Estos vientos, asegura el Senamhi, se encuentran en un nivel naranja, lo que significa que pueden alcanzar velocidades muy rápidas, llegando incluso a derribar pequeñas edificaciones que no tienen una buena estructura. Se predice que las ráfagas pueden superar los 35 km/h.

Selva

En la selva acaba de iniciarse el sexto friaje del año, que ha provocado que la selva peruana esté llena de lluvias y vientos fríos, con un descenso de 15° C, pero con alta humedad, alterando la sensación de frío en las regiones de la selva peruana.

 Friaje en la selva. Foto: Senamhi.

Friaje en la selva. Foto: Senamhi.

Sin embargo, hay zonas como Chachapoyas en el Amazonas, que podrán llegar hasta los 9° C en las noches debido a los efectos de este friaje que se va calmando: el Senamhi señala que vientos suaves se desplazarán por la región.

Costa

Mientras tanto, en la costa, la humedad ha llegado a alcanzar el 100% en algunos distritos de la costa centro de Lima. Esta humedad se debe a que la mayoría de la costa peruana se encuentra bajo la presencia de nubes altas de hielo, que son las causantes de que la sensación de frío se perciba a pesar de que la temperatura no es mínima. Además, estas nubes son producto del empuje del Anticiclón del Pacífico Sur, fenómeno de presión baja que enfría los mares y la zona sureste del continente sudamericano.

 La humedad en Lima por casi llega al 100%. Foto: captura de pantalla.

La humedad en Lima por casi llega al 100%. Foto: captura de pantalla.

También, los diversos vórtices costeros han provocado que la costa se vea sumida en una niebla espesa durante muchas semanas. Las veces que se ha presentado este tipo de vórtice, han sido a una altura muy baja, por lo tanto, llegan más rápidamente a las calles de la costa peruana.

El Anticiclón del Pacífico Sur y sus efectos en el clima del Perú

El principal efecto de este fenómeno es el cambio de un clima cálido a frío, siendo fundamental y necesario para el ciclo de las condiciones climáticas mundiales. Según el Senamhi, el Anticiclón juega un impacto significativo en el enfriamiento del mar del Océano Pacífico y el empuje del calor a otras zonas del mundo donde aún no ha llegado el verano.

Este efecto hace que en el Perú haya aires secos y fríos, beneficiando a la biodiversidad marina al traer especies que se adecúan mucho mejor a este tipo de climas; sin embargo, es todo lo contrario con la agricultura, que puede destruir cultivos helando y matando las células de las plantas. El impacto de este fenómeno se siente mucho más en la sierra y costa del país.