Arequipa tiene 135 zonas críticas donde se repetiría lo de Secocha
Advertencia. Casas de asentamientos humanos se construyeron en cauces secos. Estudio de Ingemmet advierte que son vulnerables a huaicos y derrumbes.
Así como Secocha, el anexo en la provincia de Camaná golpeado esta semana por dos huaicos, hay otros pueblos, en la región Arequipa, asentados en zonas de riesgo por el peligro geológico que tienen.
En el 2021, el Instituto Geológico, Metalúrgico y Minero (Ingemmet) había advertido que los anexos de Secocha, Posco Miski, Limaypampa y el resto que están sobre la quebrada del Posco en el distrito de Mariano Nicolás Valcárcel, provincia de Camaná; tenían que ser reubicados en otras áreas. Los pobladores se asentaron en medio de la quebrada, construyeron sus casas con material noble y prefabricado sobre un terreno que en el pasado también soportó el paso del huaico. En el futuro, ante la ocurrencia de un evento así, el deslizamiento discurrirá por la misma quebrada.
La investigadora del Ingemmet, Magdie Ochoa, explicó a La República que en toda la región hay 135 zonas críticas identificadas. El peligro predominante son los flujos o huaicos, seguido de caídas y derrumbes y la erosión de laderas.
Peligros geológicos
De acuerdo al estudio “Peligro Geológico en la región Arequipa” publicado en el año 2021, de las 8 provincias de la región, Arequipa es la que tiene mayor cantidad de zonas críticas. Pero en el resto de provincias, una de las características es que varios de esos pueblos asentados en estas áreas son mineros. Se han ido poblando debido al mayor auge de la minería informal.
En la provincia de Condesuyos, el centro poblado de Iquipi localizado en el distrito de Río Grande, también fue perjudicado por el ingreso de huaicos durante esta semana.
Ingemmet advirtió en su estudio que esta zona está sujeta a derrumbes, caída de rocas y flujo de detritos, por lo que no es apta para asentamiento poblacional y expansión urbana. Por ello, se recomendó reubicar a la población que está asentada en la ladera del cerro.
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En el anexo de la Barrera, en la quebrada Chaquiloma, en el distrito de Yanaquihua, también se recomendó lo mismo: evitar la construcción de viviendas, debido a que es un área susceptible a la ocurrencia de huaicos, es más se observan que en el pasado ya hubo estos deslizamientos que formaron un abanico de 580 metros de ancho.
San Juan de Chorunga es otro pueblo localizado sobre una quebrada que ante lluvias excepcionales podría sufrir el embate de huaicos.
Caravelí y Paucarpata
En la provincia de Caravelí se repite la situación. Según el Ingemmet, una zona crítica es la carretera Otapara y la mina Machaynioc. La población de este último lugar se ha establecido sobre la quebrada del mismo nombre, por lo que está sujeta a huaicos. También hay viviendas de la mina Esperanza y San Vicente que están en una zona compleja en el cerro Pico Blanco. Por ello, la recomendación también fue lo mismo: reubicar a las viviendas que están debajo de la mina San Vicente, así como prohibir la construcción de casas cerca del río.
Otra zona crítica es la carretera Quicacha - Chaparra - El Molino. Los poblados Quicacha, Molino, Chaparra, Animas, El Convento, Tiruque y San Andrés están asentados en antiguos depósitos de flujos, por lo que están en peligro.
"Estas zonas críticas nunca van a dejar de serlo, mientras no se tomen las medidas, vamos a tener desastres", explicó la especialista. Y es que al ser quebradas secas, en algún momento siempre va a discurrir el agua producto de la lluvias en las zonas más altas. Si es que existe la necesidad de vivienda, las autoridades locales y la población debe ponerse de acuerdo para tomar medidas de contingencia.
En la ciudad de Arequipa, por ejemplo, un claro ejemplo de la falta de planificación es el sector de Pozo Negro en el distrito de Paucarpata, que está en el medio de una quebrada. El asentamiento sufre la inundación todos los años. Este año, fue declarado en emergencia por el municipio, pues las vías con lodo, restos fecales y agua de desagüe afectaron toda la zona.
Arequipa. Foto: La República.
