Sociedad

“Sin ronderos no se acabará con terroristas del Vraem”

Autodefensas. Dirigente de los Comités de Autodefensa de Ayacucho criticó estrategia antiterrorista de las Fuerzas Armadas y ofreció la reconocida experiencia de hombres y mujeres de las rondas para terminar con la organización criminal de Víctor Quispe Palomino, camarada “José”.

Informe

Elías Navarro, enviado especial

Santa Rosa, La Mar (Ayacucho). El presidente del Comité de Autodefensa (CAD) de Gloriapata, Raúl García Gutiérrez, cuestionó a las fuerzas del orden por haber expuesto en un operativo antiterrorista la vida de los informantes “Raulito” y “Luciano”, emboscados y asesinados por elementos armados de la agrupación Militarizada Partido Comunista del Perú (MPCP).

Cuando el miércoles 4 de marzo los exterroristas “Raulito” y “Luciano” se dirigían al punto de encuentro para hacer contacto con elementos de una columna terrorista entre las comunidades de Cruz Verde y Onofrepampa, con la finalidad de que desertaran y se entregaran a las autoridades, sujetos armados los asesinaron a balazos.

“Han muerto por una mala estrategia y por no contar con protección. Fueron enviados prácticamente a la ‘boca de lobo’. No les perdonaron la vida por haber abandonado el partido y haberlos traicionado”, dijo Raúl García, dirigente de Gloriapata, cerca del lugar de los hechos.

Familiares que viven en las poblaciones de Cruz Verde y Onofrepampa buscan explicaciones de lo sucedido con los colaboradores de las fuerzas el orden. “Raulito” era hijo del fallecido terrorista conocido como camarada “Lanchi”.

“Raulito” y “Luciano”, custodiados únicamente por un agente de la División de Investigación de Alta Complejidad (Diviac), llegaron en una camioneta 4x4 de la Dirección Antidrogas a un encuentro con un grupo de supuestos capituladores o desertores.

Como sucedió el 2 de octubre de 1999, en la localidad de Anapati, en Satipo (Junín), el cabecilla de la banda criminal, Víctor Quispe Palomino, camarada “José”, simuló rendirse y atrajo a las fuerzas del orden y a sus informantes o colaboradores. Cuando arribaron al punto de encuentro, fueron asesinados 6 militares y 2 exterroristas.

Esta vez los excompañeros de “Raulito” y “Luciano” los engañaron diciéndoles que varios miembros de la columna terrorista se rendirían y acordaron encontrarse para proceder a la supuesta rendición. Al llegar la camioneta a una zona entre las comunidades de Cruz Verde y Onofrepampa, un terrorista apostado en una loma los detuvo y salieron varios hombres más para asesinar a “Raulito” y a “Luciano”.

En el meollo

“Las fuerzas armadas aplican una mala estrategia en la lucha contra el terrorismo. No hay resultados y la organización de Víctor Quispe Palomino sigue siendo una amenaza para la sociedad. Sin apoyo de los comités de autodefensa (CAD), nunca van a acabar con el grupo de terroristas que está en el Vraem”, expresó el jefe rondero de Gloriapata, Raúl García Gutiérrez.

Raúl García dijo que los comités de autodefensa a su cargo están prestos a brindar apoyo a las fuerzas armadas si lo solicitan para capturar a los terroristas del Vraem.

“En Gloriapata estamos organizados y somos muy celosos. Pertenecemos a la zona Alberto Zambrano donde hay 10 anexos como Miraflores, Marintari, Vistoso, Comunpiari, San Luis y otros. Cuando hay alguna alerta inmediatamente nos comunicamos con el pueblo con parlantes, y por celular con todos los 37 anexos, y así realizamos cercos para capturar a los delincuentes comunes”, expresó.

La misma táctica podría aplicarse para capturar a los terroristas de Víctor Quispe Palomino, que desde hace más de 20 años se encuentra oculto en las diversidades geográficas del Vraem.

El 4 de marzo, a las 9 de la noche, por lo menos mil personas de estos anexos detuvieron a 8 efectivos de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), confundiéndolos con delincuentes. Estos agentes habían ingresado a las alturas de Gloriapata con refuerzos, tras la emboscada terrorista que terminó con la existencia de “Raulito” y de “Luciano”.

“La población enfurecida acudió con piedras, palos y lanzas y ubicó a los uniformados a la altura de la Antena Movistar de Muzubamba Alta y los trajo retenidos al local de la municipalidad. Pero luego de las aclaraciones, fueron liberados”, dijo.

Esto significa que, efectivamente, las rondas son eficaces para controlar a personas armadas en la zona. Las rondas fueron clave para derrotar a los terroristas de Sendero Luminoso durante el conflicto armado 1980-2000.

Experiencia a dispocisión

El alcalde del centro poblado de Gloriapata, Nerenio Junco Huanaco, detalló que los pueblos en Santa Rosa están organizados, y si las Fuerzas Armadas solicitan apoyo, será más eficaz una estrategia para detener a “José” y destruir su organización armada.

“El distrito de Santa Rosa tiene 37 anexos (comunidades), que están divididos en tres zonas: zona Alberto Zambrano (Gloriapata), zona Sana y zona Simariba. Cuando hay alerta, inmediatamente la población, dirigida por los comités de autodefensa, salen a patrullar la zona y a capturar a los delincuentes. Somos muy organizados porque antes había robos, violaciones y hasta secuestros de menores. Nosotros no queremos más violencia, somos un pueblo pacífico”, explicó Nerenio Junco.

El exlíder de los Comités de Autodefensa del Vraem Jorge Choque Quispe, dijo que la negociación de rendición se hizo a la ligera, sin un plan estratégico que fuera efectivo y por eso fracasó, perdiéndose a dos importantes colaboradores.

“Fue un gravísimo error. Se hubiera tenido en cuenta la seguridad de los colaboradores para evitar que fueran emboscados. Nosotros los de los Comités de Autodefensa nunca hemos coincidido con la estrategia del Ejército. Por eso sucedió la emboscada de Anapati, el 2 de octubre de 1999. El camarada ‘Raúl’ (Jorge, hermano de Víctor Quispe Palomino) les hizo creer que se iba a producir la rendición masiva de los senderistas, y ahí murió el coronel EP José Orihuela Lavado tras una emboscada a un helicóptero”, argumentó Jorge Choque.

“Nosotros tenemos estrategias más efectivas que los militares, por dos razones: conocemos a las personas y conocemos el territorio. Por eso hemos contribuido en la pacificación del país en los años 80 y 90”, apuntó Jorge Choque.

El exdirigente rondero criticó duramente el plan diseñado y ejecutado por el Comando de Inteligencia de Operaciones Especiales Conjuntas (Cioec), señalando que este fracaso va a tener consecuencias para los trabajos posteriores, pues los desertores ya no querrán colaborar.

“Hay una gran irresponsabilidad porque no han previsto la seguridad de los colaboradores. Fueron a una negociación infructuosa y murieron en el intento. Estos dos muchachos han venido de buena fe a colaborar con las fuerzas del orden y terminaron muertos. El incidente va a generar un antecedente negativo, ya que los desertores no van a querer colaborar”, opinó Jorge Choque.

“Con lo ocurrido a ‘Raulito’ y a ‘Luciano’ ya no van a querer desertar, porque han visto que hay un escarmiento de muerte para los que desertan. Es lamentable que no hayan garantizado las medidas de seguridad para estos dos muchachos”, razonó el exdirigente rondero.

Guerras ganadas

Para Jorge Choque, con el apoyo de los Comités de Autodefensa se hubiera logrado un trabajo efectivo para capturar a los terroristas en este punto de encuentro. “Se hubiera planificado una operación tipo ‘Plan Cerco’ y capturar a ese grupo senderista”, indicó.

Recordó que en los años 80 y 90 los senderistas tenían campamentos itinerantes en las alturas de Santa Rosa, como Guindamito, San Agustín, Ccahuasana, Yanaorcco, Niñaccasa, entre otros, pero el mayor grupo se refugiaba en Sello de Oro al mando del camarada “Benjamín”.

“Con nuestros propios recursos y abandonando a nuestras familias, libramos una lucha frontal con la subversión y de esta manera hemos derrotando militarmente a Sendero Luminoso. Pero los laureles de nuestra lucha se los llevaban siempre los militares”, expresó Jorge Choque.

“Los ronderos conocemos mejor que nadie los lugares de desplazamiento y los campamentos donde se esconden los terroristas y, sobre todo, contamos con estrategias y tácticas de combate. En esos tiempos, junto con las patrullas militares desplegamos patrullajes y ‘peinadas’ en las zonas altas de los distritos de Ayna, Santa Rosa, Samugari, Anco, Sivia, Llochegua y otros lugares en busca de los terroristas”, afirmó.