Fiscalía solicita información sobre comercialización de cigarrillos electrónicos
La Organización Mundial de la Salud los califica de “indudablemente dañinos”. Actualmente, no hay regulación en Perú y Ministerio Público solicita información sobre las acciones de control de la comercialización.
Estados Unidos denunció una “epidemia" de uso de cigarrillos electrónicos entre 153 personas -la mayoría jóvenes- quienes presentaron graves problemas de respiración. Todos ellos usaban este dispositivo para vapear nicotina o tetrahidrocannabinol, el compuesto de la marihuana responsable de los efectos psicotrópicos.
Ante dicha realidad, el Ministerio Público, a través de la Tercera Fiscalía Provincial Civil de Lima, solicitó al Ministerio de Salud (Minsa), que informe sobre las acciones de control, comercialización y prevención en la venta de cigarrillos electrónicos.
El fiscal a cargo, Alex Alonso Azucena Delgado, sostuvo que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA siglas en inglés) de Estados Unidos determimó que los cigarrillos electrónicos tendrían gran cantidad de acetato de vitamina E, sustancia que aspirada produce graves daños al sistema respiratorio, incluso la muerte.
Así, el Ministerio Público tomó esta decisión tras las noticias que alertan sobre posibles riesgos para la salud de las personas.
A finales de agosto, un Comité del Congreso estadounidense abrió una investigación a las cuatro principales compañías de cigarrillos electrónicos sobre los impactos en la salud pública de sus productos y sus prácticas de comercialización, especialmente en los adolescentes.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) también fue cuestionada, puesto que en el 2016 empezó a supervisar los cigarrillos electrónicos. En teoría debía regular a las empresas que vendían el nuevo producto en solo un año, pero la agencia postergó hasta agosto del 2022 el plazo de solicitud para revisión de seguridad y salud pública. Así, grupos antitabaco demandaron a la FDA.
Cómo funciona un cigarrillo electrónico
Los cigarrillos electrónicos son dispositivos que no queman ni utilizan hojas de tabaco sino que vaporizan una solución que inhala el usuario, según la OMS.
La solución líquida se calienta mediante el uso de una batería que, generalmente, contiene nicotina.
Se supone que los cigarrillos electrónicos regulan el uso de la nicotina y deberían ayudar a controlar la adicción a esta, pero en lugar de ello aumenta las posibilidades del consumo de otros productos de tabaco, según Rogger Torres, integrante del equipo de la Dirección de Promoción de Salud del Minsa.