Sociedad

SJL: Feminicida se interna en hospital y su madre lo entrega a la Policía

No más muertes. Tras conocer el paradero de Julio Moscol Gamarra (44), su mamá avisó a la PNP para que lo capturen. Horas antes, él había asesinado a su esposa Lucía Ceras Escobar (34). MIMP ya reporta 100 víctimas de feminicidios.

Por: Óscar Chumpitaz C.

“Nunca entenderé por qué lo hizo”. Esa incógnita es la que tiene la madre de Julio César Moscol Gamarra (44), el feminicida que huyó con su hija de 9 años tras asesinar a su esposa, en San Juan de Lurigancho (SJL).

La investigación sobre este asesinato avanzó ayer con el aporte de la desesperada mujer, quien ayudó a la Policía Nacional a ubicarlo durante el plazo de flagrancia de delito.

El asesino fue detenido 12 horas después de acabar con la vida de Lucía Ceras Escobar (34), a quien acuchilló y destrozó la cabeza con una piedra, en el día de su cumpleaños. Lo hizo luego de reclamarle haber pasado la noche fuera de su casa.

Luego deambuló por diversas calles de Lima con la pequeña L.L.M.C., antes de llegar a la vivienda de su madre Zoila Gamarra, quien se había enterado de lo ocurrido a través de los noticieros.

Se dirigió al nosocomio

A las 8:30 de la noche del jueves último, Julio Moscol ingresó al hospital Edgardo Rebagliati por una supuesta agitación psicomotriz (trastorno o urgencia psiquiátrica). Su mamá llamó a la comisaría de Magdalena del Mar y comunicó dónde se encontraba su hijo.

Personal de esa dependencia informó, a su vez, a los agentes del departamento de Investigación Criminal N° 1 de San Juan de Lurigancho, quienes lo ubicaron en el nosocomio cuando recibía atención psicológica.

Acorralado, no tuvo otra alternativa que firmar el acta de detención por presunto delito de feminicidio y se dispuso que el personal policial permaneciera en el hospital hasta que se disponga su alta.

Moscol Gamarra había acumulado cuatro denuncias por violencia familiar y agresión sexual. A través de una resolución judicial, le impedían acercarse a Lucía Ceras.

Los documentos que tienen los familiares de la víctima dejan en evidencia las denuncias que ella presentó en vida, por maltrato físico y psicológico.

Una de ellas se registró el 6 de noviembre del 2012 por abandono de hogar, otra el 9 de junio del 2017 por violencia familiar y la última fue por una agresión con martillo en agravio de Estanislao Ubaldo Diego, expareja de Lucía. Además, tiene una denuncia por violación sexual a una menor de edad, ocurrido el 30 de octubre del 2006.

A través de una resolución judicial, el juez Ocner Córdova López ordenó que, el ahora feminicida, no se acerque a su víctima. Pese a esto, Julio Moscol continuó hostigando a Lucía hasta que la asesinó. Las medidas de alejamiento o preventivas no sirvieron en este caso.

Piden cadena perpetua

Robert Ceras, hermano de la víctima, pide la máxima sanción para el asesino quien fue capturado y permanecía, hasta ayer, en custodia policial.

“Estamos destruidos, no sé qué hacer, mi hermana ya no está a nuestro lado. Solamente queremos justicia, que ese maldito asesino vaya a cadena perpetua”, dijo entre sollozos.

Y mientras las cifras por estos delitos continúan en aumento en el país, la estrategia de Julio Moscol Gamarra, responsable del feminicidio N° 100, pasaría por aducir ‘demencia’. Se espera justicia.

30 asesinatos de mujeres solo en Lima

Hasta antes del asesinato de Lucía Ceras, el Programa Nacional contra la Violencia Familiar y Sexual del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) registró 99 casos de víctimas de feminicidio (30 en Lima Metropolitana) durante el primer semestre.

Además, en Lima Metropolitana, los Centros de Emergencia Mujer (CEM) atendieron 22.319 casos de enero a junio, de los cuales el 82.9% fueron de mujeres víctimas.

El MIMP ha creado 59 CEM en Lima, 25 que funcionan en convenio con las municipalidades provinciales y 34 en comisarías en coordinación con el Ministerio del Interior y la PNP.