Traslado. Hampón “Gringasho” fue derivado al penal de Cerro de Pasco, al parecer por mala conducta.,Chiclayo. Personal del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) evitó que internos de los penales de Cajamarca y Chiclayo fuguen de sus instalaciones, luego de que recibieran la información de que mantenían permanente comunicación con el exterior a través de teléfonos celulares. En el penal de Cajamarca se informó que serían unos once internos los que querían escapar, entre los que se encuentran Luis Octavio Altuna Vallejos (a) “Luchito”, presunto cabecilla de “Los Letales del Norte”. José Antonio Abanto Rivero (a) “Chino”, pertenecería a la banda delincuencial “Los Despiadados de San Juan de Lurigancho”, y habría realizado asaltos y robo a mano armada en la modalidad de taxi colectivo. Asimismo José Gamboa Cruzado, presunto miembro de “Los Malditos de El Porvenir”, de Trujillo, que también operaría en Chimbote y Cajamarca. PUEDES VER Migrantes toman el poder en Lambayeque Ernesto Alonso Vásquez Olivas (a) “Cara de perro”, pertenecería a la banda “Los Gatilleros del Caracol del Callao”. En las acciones la Policía encontró 53 teléfonos celulares, así como más de 1,300 ketes de pasta básica de cocaína. En el penal de Chiclayo se encontró en las celdas de diez internos teléfonos celulares, los que además de usarse para coordinar su supuesta fuga también se utilizaban para perpetrar coordinaciones para la comisión de ilícitos penales, como las extorsiones. Funcionarios del INPE revelaron que los involucrados en estos actos deberán ser trasladados a otros penales de máxima seguridad, pues ha probado que se trata de maleantes de alta peligrosidad. No se descarta que estén siendo llevados a los penales de Challapalca y de Cochamarca, en donde estarán bajo un estricto régimen. La requisa en el penal de Chiclayo se realizó en los aleros “C” y “D”, correspondiente al Régimen de Máxima Seguridad del centro penitenciario de Picsi, donde están recluidos cabecillas de bandas criminales. “GRINGASHO” De otro lado, en horas de la madrugada de ayer, Alexander Pérez Gutiérrez, (a) “Gringasho”, fue trasladado del penal El Milagro de Trujillo hasta el centro penitenciario de Cochamarca, en Cerro de Pasco, ubicado a 4,350 metros sobre el nivel del mar. El llamado sicario más joven del país habría cometido una serie de infracciones al interior del centro carcelario y según fuentes del INPE existiría la intención de fuga. Los directivos del INPE ya conocen sus antecedentes y que hace poco protagonizó una espectacular fuga. Personal del Grupo de Operaciones Especiales (GOES) del INPE llegó hasta la celda del interno y luego de esposarlo lo subieron a una furgoneta rumbo a su nuevo destino. En esa cárcel se encuentran los criminales más peligrosos del país. Ellos viven en completo aislamiento y tienen un horario para salir de sus celdas y también para recibir visitas por parte de sus familiares. “Gringasho” fue capturado a balazos la noche del pasado sábado 8 de setiembre en el sector Kumamoto del distrito El Porvenir, con un fusil y tres cacerinas en un estuche que arrojó mientras huía de sus captores. Luego fue enviado a prisión por orden del Séptimo Juzgado de Investigación Preparatoria de Trujillo, que dictó nueve meses de prisión preventiva en su contra por el presunto delito de tenencia ilegal de armas. Por el momento se sabe que el interno es trasladado bajo estrictas medidas de seguridad, pues no se descarta que exista alguna intención de rescate por parte de sus compinches, quienes lo quieren de líder. CLAVE Se sabe que el personal del INPE ha incrementado el control en todos los penales del país para evitar que escapen los internos. Estas acciones se estarían coordinando con la Policía Nacional del Perú (PNP), la que tiene la custodia del control externo de las cárceles.