José Villanueva, periodista de Vatican News ,Hoy en día el mundo enfrenta una serie de crisis en el ámbito de la economía, la política, el campo social y el medio ambiente. Estas suelen ser provocadas por la insensatez e incapacidad de los gobiernos que no se encuentran a la altura y la capacidad de atender y resolver las demandas y necesidades de sus ciudadanos. Casos muy frecuentes que suelen verse en países con gobiernos autoritarios y totalitarios, donde los derechos humanos no se respetan y precisamente son uno de los motivos por los que se origina el incremento de la pobreza y hasta en un punto extremo la aparición del terrorismo. Basta con mirar este panorama de algunos países como en la República Democrática del Congo, la República Centroafricana, Chad, Libia, Sudán del Sur; o los países de oriente medio como Siria, Irán, Egipto, Líbano, Palestina o Israel, donde todos los días ocurren enfrentamientos, violaciones a los derechos humanos de la gente y el fantasma de la hambruna que se asoma en muchos de estos países. No menos preocupante es la situación en la región Latinoamérica, como Nicaragua, Venezuela, o la alta inflación económica que desde hace varios años viene sufriendo la Argentina, seguida por el cáncer de corrupción que ha remecido y puesto en riesgo la estabilidad política en Brasil, Colombia, Ecuador y Perú. PUEDES VER: Una mirada esperanzadora de los jóvenes En estas circunstancias, valdría preguntarnos, ¿qué piensan los jóvenes sobre esta situacion y cómo podrían hacer para tener una participación en la Acción Humanitaria? En el plan de la Agenda 2030 de la ONU se indica la necesidad de la promoción de los jóvenes en la acción humanitaria. Según los estudios de las Naciones Unidas, el mundo cuenta con una relevante generación de jóvenes, cuyo cálculo se estima ser de hasta 1.8 billones, donde el 90% de ellos provienen de países en vías de desarrollo, constituyendo una gran proporción de la población. Este factor demuestra que los jóvenes representan un factor importante para el bienestar de sus propias comunidades y ser los mejores servidores para dar la estabilidad a la sociedad. En ese sentido, algunos países están comenzando a mirar con interés a sus próximas generaciones y a invertir en la formación académica de los jóvenes, la misma que será devuelta en la contribución que cada joven pueda retribuir con su trabajo para su propia comunidad. El pasado 23 de abril, en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, se llevó a cabo un debate llamado “Jóvenes, Gente, paz y seguridad”. En dicho coloquio, se escuchó la voz de tres jóvenes representantes de instituciones internacionales dedicadas a la promoción de los derechos de los jóvenes, ellos dieron a conocer las demandas y necesidades que la comunidad internacional debe hacer para promover la acción humanitaria de los jóvenes. PUEDES VER: Los jóvenes, agentes del cambio de la política actual Los tres líderes juveniles coincidieron en la necesidad de exigir un mayor reconocimiento y respeto para con los derechos de los jóvenes, los cuales por consecuencia de los conflictos sociales, desastres o crisis humanitarias en sus lugares de origen, se ven limitados y hasta restringidos, impidiendo que puedan desarrollar sus metas. Sin duda esto genera desventaja en la juventud mundial, perdida de motivación y de esperanza, que los jóvenes tienen en la sociedad y en sus autoridades locales, al no sentir el respaldo de estas, generando frustración y en muchos casos hasta el desprecio por la sociedad. Por todo ello, es importante que desde el centro de la toma de decisiones del mundo, se comiencen a evaluar y escuchar nuevas iniciativas a favor de los jóvenes y garantizarles una mayor participación en la Acción Humanitaria, donde ellos sean impulsores en ayudar a construir la estabilidad mundial y contando siempre con el apoyo de la experiencia dejada por las generaciones predecesoras. En consecuencia, la comunidad internacional está llamada a garantizar que los jóvenes tengan acceso a todos los derechos y deberes involucrados y así poder lograr el desarrollo sostenible que se plantea en la Agenda 2030. ...................................... Redacción: La Periferia es el Centro. Escuela de Periodismo - Universidad Antonio Ruiz de Montoya