Niño de 12 años muere baleado: familia intenta linchar al presunto culpable y destruye su casa
Una víctima más de la inseguridad en Argentina. El menor recibió un balazo en medio de tiroteo entre bandas de narcotraficantes, según informaron medios locales.
Un niño de 12 años se convirtió en una nueva víctima de la inseguridad en Argentina. El menor falleció luego de recibir un balazo en el pecho tras un tiroteo entre bandas de narcotraficantes en el barrio Empalme Graneros, en Santa Fe, según informaron medios locales. “Estamos cansados de la inseguridad. ¿Qué más tenemos que esperar?”, dijo Antonia Jerez, tía del menor, al medio local TN.
“Todos los vecinos están indignados y furiosos (…). Vino un auto, tiró los tiros al azar y uno impactó en el corazón de Máximo”, señaló Jerez . Remarcó: “No hay explicación, te da tanta impotencia porque se meten con chicos inocentes. La vida es tan injusta. Los cuidas tanto para que vengan y te saquen a un inocente”.
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Destruyen la casa del 'Salteño'
Vecinos y familiares del menor de 12 años, indignados por lo sucedido, atacaron la casa del hombre acusado del asesinato y de vender drogas en el barrio de Los Pumitas, Rosario. La Policía acudió al lugar donde el sospechoso, conocido como el 'Salteño', fue apedreado.
Los efectivos realizaron disparos con balas de goma para dispersar a los familiares enardecidos. "Seguro en un rato lo largan", dijo el papá en rechazo al despliegue policial. La agencia argentina Télam informó que el sospechoso fue detenido por agentes de Santa Fe junto a dos de sus hijos y dos de sus familiares.
“Reaccionamos así por mi sobrino. Amenazaron a mi hermana, que está en el hospital. El señor ('Salteño') fue a amenazar a Margarita (madre de Máximo). Yo estoy jugada. Cuando todo termine, a nosotros nos van a ca**** a tiros, ya lo sabemos”, dijo la tía de Máximo a TN.
Tras el arresto y con la vivienda vacía, los vecinos ingresaron al domicilio por las puertas, ventanas y huecos en las paredes que habían sido destruidas con martillos. Le prendieron fuego a la casa y destruyeron todo a su paso. A su vez, sacaron heladeras, colchones, muebles, hasta inodoro y bidet.