La Gran Muralla Solar de China: el titánico megaproyecto de la planta solar más grande del mundo
Con la capacidad para abastecer a 20 millones de personas, este vasto parque solar en China transformará el desierto de Kubuqi en un oasis energético, el cual además reducirá la desertificación y mejorará las condiciones del suelo.
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China mantiene su liderazgo en el área energética y ahora apuesta por un ambicioso megaproyecto: la construcción de la Gran Muralla Solar, el mayor parque fotovoltaico del mundo. Ubicado en el desierto de Kubuqi, esta gigantesca infraestructura busca aprovechar las más de 3.100 horas de sol anuales de la región para generar energía renovable y contribuir significativamente a la reducción de emisiones de dióxido de carbono.
Con una capacidad proyectada de 100 gigavatios (GW) para 2030, esta planta superará ampliamente a cualquier otra instalación de infraestructura energética en el mundo. En la actualidad, se han instalado 5,42 GW, suficientes para suministrar electricidad a entre 300 000 y 400 000 personas. Se estima que, una vez terminada, podrá generar 180 000 millones de kilovatios hora al año, lo que equivale a cubrir el consumo de 20 millones de personas, es decir, más de dos veces la población de Nueva York.
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La planta, que ya cuenta con 5,42 GW instalados, generará 180.000 millones de kilovatios hora al año. Foto: Feng Li
La Gran Muralla Solar china que busca transformar el desierto de Kubuqi
El desierto de Kubuqi, conocido por sus condiciones extremas y apodado el "mar de la muerte", ha sido transformado en un oasis energético gracias a la instalación de paneles solares que no solo generan energía solar, sino que también ayudan a mitigar la desertificación.
Según un estudio de la Universidad de Tecnología de Xi'an, los paneles fotovoltaicos crean sombra, reducen la evaporación del agua y permiten el crecimiento de vegetación en áreas antes áridas. Este fenómeno ha generado un impacto ambiental positivo, el cual ha mejorado las propiedades del suelo y promueve la reforestación, un objetivo clave en la estrategia de sostenibilidad de China.
a instalación de paneles solares en el desierto de Kubuqi crea sombra, reduce la evaporación del agua y permite el crecimiento de vegetación. Foto: Xinhua
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La planta, que se extenderá por 400 kilómetros de longitud y 5 kilómetros de ancho, utilizará tecnología bifacial, capaz de captar la radiación reflejada por la arena. Además, se espera que la instalación contribuya significativamente a la lucha contra el cambio climático y evite la emisión de hasta 31,3 millones de toneladas de CO₂ anualmente.
¿Podrá la Gran Muralla Solar abastecer a una megaciudad como Beijing?
Con una demanda energética creciente, la Gran Muralla Solar de China podría desempeñar un papel crucial en el suministro eléctrico de Beijing, una ciudad que consumió 135.800 millones de kilovatios hora en 2023. La planta garantizaría un flujo constante de energía renovable y reduciría la dependencia de fuentes contaminantes como el carbón.
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Algunos de los beneficios clave de esta megainfraestructura para Beijing y otras regiones incluyen:
- Mayor autosuficiencia energética, lo que reducirá la dependencia de combustibles fósiles.
- Menor contaminación del aire, que contribuirá a la mejora de la calidad de vida urbana.
- Estabilidad en el suministro eléctrico, el cual favorece el desarrollo económico sostenible.
- Impulso a la innovación tecnológica, con la implementación de módulos solares más eficientes y duraderos.
