Organizaciones acusan a Malala Yousafzai de ser una agente de otros países para implantar una ideología secular en Pakistán. ,Malala Yousafzai regresó a su país Pakistán, pero no tuvo una buena bienvenida. La principal federación de colegios privados de esa nación con 200.000 escuelas afiliadas,protestó este viernes bajo el lema “Yo no soy Malala”, en la que acusó de “terrorismo ideológico” a la Premio Nobel de la Paz. Yousafzai volvió el jueves al país por primera vez desde 2012 luego de que fuera víctima de una atentado que casi le cuesta la vida. PUEDES VER: Malala celebra su último día en la escuela abriendo su cuenta en Twitter Profesores pertenecientes a la federación, que ya en 2014 prohibió la lectura en sus centros del libro de la activista “Yo soy Malala”, lucieron brazaletes negros y explicaron en las clases a los niños los “perversos” planes de Malala Yousafzai. En rueda de prensa el presidente de la Federación de Colegios Privados de Pakistán, Mirza Kashif Ali, acusó a la joven de 20 años de trabajar como agente para otros países, transmitir una ideología secular, es decir, tener una actitud crítica y escéptica ante los dogmas religiosos de cualquier tipo. Otros grupos religiosos publicaron videos donde acusan a Malala de hacer un gran daño a la imagen internacional del país, especialmente del poderoso Ejército. La activista es un icono global por su lucha por la educación femenina, pero en su propio país es una figura vilipendiada por algunos, que la acusan a menudo de dañar al país o trabajar para la CIA, entre otras teorías.