Mujer es la primera mexicana en ser acusada en EE.UU. por apoyo material al CJNG como grupo terrorista
María del Rosario Navarro Sánchez fue acusada formalmente en la Corte de Distrito Oeste de Texas por su presunta colaboración con el CJNG. La fiscalía la señala por traficar armas, entre ellas un fusil AM-15 multicalibre, y granadas.
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Una mujer mexicana, identificada como María del Rosario Navarro Sánchez, fue acusada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos por su supuesta participación en la logística armamentista del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), considerado por autoridades estadounidenses como un grupo terrorista extranjero. Según informó el medio Milenio, Navarro Sánchez enfrenta cargos por apoyar a esta organización criminal mediante el contrabando de armamento y explosivos desde suelo estadounidense hacia México.
De acuerdo con los documentos judiciales presentados por la fiscalía en la Corte de Distrito Oeste de Texas, Navarro está señalada por traficar diversas armas, incluidas granadas y un fusil AM-15 multicalibre, que presuntamente entregó al CJNG con pleno conocimiento de que serían utilizados para actividades delictivas. Este caso marca un precedente, ya que representa el primer caso en que un ciudadano extranjero es procesado por colaboración con una organización criminal mexicana bajo cargos de terrorismo en Estados Unidos.
El perfil de María del Rosario Navarro Sánchez
Navarro Sánchez, de nacionalidad mexicana, fue detenida en California el 29 de febrero de 2024. La fiscalía la identificó como una persona clave en las operaciones del CJNG relacionadas con el tráfico de armas desde Estados Unidos hacia territorio mexicano. Según el reporte de Milenio, las autoridades estadounidenses creen que la acusada formaba parte de una red logística encargada de abastecer armamento de alto poder al grupo terrorista.
En los documentos judiciales, los fiscales señalaron que Navarro Sánchez no solo facilitó el traslado de armas, sino que también tenía conocimiento explícito del uso que el CJNG daría a ese armamento, incluyendo fusiles automáticos y granadas, utilizados para combatir a fuerzas de seguridad y organizaciones rivales. “Este caso es un ejemplo de cómo las leyes antiterroristas se pueden aplicar a organizaciones criminales extranjeras como el CJNG”, citó el Departamento de Justicia.
Un precedente en la aplicación de leyes antiterroristas
El caso de Navarro Sánchez cobra relevancia porque el Departamento de Justicia ha comenzado a aplicar leyes que usualmente se reservan para organizaciones internacionales extremistas a cárteles del narcotráfico. En esta ocasión, la acusación se sustentó bajo el argumento de que el Cártel Jalisco Nueva Generación actúa como un grupo terrorista al emplear tácticas violentas y armamento militar para intimidar y controlar regiones tanto en México como en los Estados Unidos.
La fiscalía estadounidense afirmó que Navarro también facilitó la logística para traficar armas, drogas y personas, lo cual refuerza la idea de que el CJNG no solo representa un peligro para México, sino también para la seguridad interna de Estados Unidos. Esta caracterización permitió que las autoridades federales imputaran a la acusada con base en leyes antiterroristas, lo que implica penas más severas.
Además del fusil AM-15 multicalibre, el arsenal identificado en la investigación incluye dispositivos explosivos y armas largas, todos comprados en Texas y contrabandeados hacia México. La operación que condujo a su captura fue coordinada entre agencias estadounidenses, incluidas el FBI y la ATF.
