Zelma Gálvez se quiebra al hablar de sus errores en 'El gran chef': "No me da risa, sufro"
La actriz Zelma Gálvez abrió su corazón y contó lo que siente tras ingresar a 'El gran chef: famosos', su faceta poco conocida como empresaria y su relación con Carlos Álvarez.
Zelma Gálvez ingresó a 'El gran chef: famosos' y se robó de inmediato el corazón de miles de peruanos. En entrevista con La República, la artista contó cómo lidia con los momentos de frustración durante las grabaciones del reality culinario, su faceta como empresaria, su opinión sobre las amenazas que recibió Carlos Álvarez, entre otros temas.
'El gran chef: famosos'
—¿Cómo te llegó la propuesta de estar en 'El gran chef: famosos'?
—Me llamó la producción de 'El gran chef' y la pregunta de fondo fue si sabía cocinar. Yo dije: 'Ni sé hervir agua'. Ellos respondieron: 'Eres lo que necesitamos'. Volví a Latina después de más de 30 años y me sorprende conectar con nuevas generaciones. Niños, jóvenes y señoras me dicen cómo debo hacer el arroz, que me preocupe y me concentre. Me siento bastante comprometida con lo que la gente espera de mí.
Soy una persona muy distraída, contesto el teléfono y cuando vuelvo ya se quemó todo. Entonces no puedo cocinar porque soy un peligro.
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—¿Cómo es tu vínculo con Giacomo Bocchio, Javier Masías y Nelly Rossinelli detrás de cámaras?
—Estoy rodeada de gente que me trata con demasiado cariño, algo a lo que no estoy acostumbrada porque yo soy una persona muy guardada. Me volví por inercia solitaria a raíz de la pandemia y, como vivo sola, yo no tengo el diálogo inmediato. Así que interaccionar en vivo con la gente me encanta y, sobre todo, veo que no hay envidia.
Yo he sido educada a la antigua y nunca me he tomado las confianzas con profesores ni tutores ni la gente a la que estoy yo como subordinada. Respeto esa línea y no me gusta cruzarla. El jurado está ahí porque se ha ganado su sitio, son merecedores. Yo no puedo refutar porque todo tiene una lógica y una realidad a veces cruda.
A mí, particularmente, (Javier) Masías pasa y a mí me da taquicardia. Él es un señor tan serio que, cuando estamos detrás de cámaras, él tiene un gesto de cariño conmigo y no me la creo. Yo soy media 'chucha' para tomarme la libertad de acercarme con gente que recién conozco. Yo trato de mantener la línea de la pequeña distancia para no tener ni expectativas ni perder la responsabilidad.
—¿Cuál es la promesa que le haces a tus fans de 'El gran chef' que esperan que llegues a la final?
—Yo lo estoy haciendo todo muy en serio. Lo que están viendo es la realidad. Esos sentimientos que me desbordan, las angustias, las penas, las alegrías, las travesuras, así soy yo. No actúo ni exagero, soy un desastre, soy muy distraída.
Tengo una formación muy sana y mis puntos de vista por haber hecho tanto teatro para niños se me ha incorporado a mi forma de ser, que mis expresiones son muy acentuadas. Es por eso que la gente me ve como un anime, un dibujo animado.
—Sufriste un episodio de ansiedad en 'El gran chef: famosos', ¿cómo lidias con los momentos de frustración?
—A mí me da vergüenza, yo me frustro mucho y me siento muy apenada cuando se me queman las cosas. Yo me sorprendo a mí misma verme tan confundida y la verdad es que me ha dejado pensando. Me consideraba más rápida e ingeniosa.
Aquella vez en la que me pasó este episodio de ansiedad me dio tanta vergüenza quedar mal ante el jurado, no me aguanté, no sabía qué hacer. No pude contener la frustración y lloré de la vergüenza.
Nunca he tenido la responsabilidad de cocinar y, ahora que lo he intentado, me he dado cuenta de que soy un desastre, me ha compungido, pero estoy aprendiendo. Sin embargo, digo: '¿Cómo es posible que haya hecho una papa rellena del tamaño de un bebé?'.
La gente se ríe, pero yo en el fondo me avergüenzo. No me da risa mis errores, sufro, me da pena y yo quisiera llegar lo más lejos posible para no decepcionar a quienes están confiando en mí y creen que voy a lograr tener la olla.
Zelma como empresaria
—Además de tu faceta como actriz, también eres empresaria...
—Yo tengo una empresa que se llama D'PROMART, es una productora de eventos que nació en el año 1987 y la especialidad es ventas de entradas de obras de teatro y circos. Yo he estado durante 15 años metida viendo terrenos, carpas, programación de temporada de circos. En paralelo, organizamos eventos privados para corporativos.
Carlos Álvarez
—¿Qué recuerdos guardas de Carlos Álvarez, con quien iniciaste en el mundo de la TV?
—Es increíble la oportunidad que tuve de que Carlos me descubriera en la televisión, yo venía haciendo teatro para niños y él me sacó de una de esas salas. Para mí es este el número uno en el país, hasta el día de hoy existe una relación de respeto, cordialidad y familiaridad.
—¿Qué opinas sobre las amenazas que recibió Carlos Álvarez tras sus críticas a Dina Boluarte?
—Si Carlos fuese una persona cómoda, tendría un programa en vivo ahorita en televisión. Él es un hombre muy comprometido con su punto de vista y uno de los pocos patriotas que se la juega. El resultado es que le han cerrado, aparentemente, las puertas de la pantalla chica. Sin embargo, él se la está ingeniando en el mundo digital. Lo sigo y espero que la libertad de la expresión no se vea secuestrada por el Gobierno de turno.