César Ritter: “El teatro me ayudó a encontrar lo poquito que sé”
Actor que está por partida doble en el streaming (”Busco novia” y “Las mejores familias”) habla de su stand up y del TDAH.
César Ritter cierra el año con buenas nuevas. El actor se encuentra en las plataformas digitales, por partida doble y el stand up que ha estrenado, Papá palayentis, está recibiendo tan buena acogida que ya tiene fechas para un local de Barranco y para la ciudad de Iquitos.
Actualmente lo podemos ver en Prime Video con Busco novia (Daniel Vega) y Las mejores familias (Javier Fuentes-León) y, por si fuera en poco, la segunda trama se encuentra, además, emitiéndose en España por Movistar Plus y en Estados Unidos por HBO Max.
“Busco novia está siendo bien recibida y creo que ese cariño es una retribución a nuestro trabajo. Se trata de una película divertida y familiar”, dice sobre la trama basada en el blog del periodista Renato Cisneros, donde alterna con Magdyel Ugaz y el mexicano Vadhir Derbez. “Mientras que Las mejores familias es una comedia negra interesante, donde se ha querido mostrar, un poco, la burbuja en la que vivimos”.
Ritter, además, espera estrenar en el 2023 Muertos de risa (Gonzalo Ladines), donde da vida a Javi Fuentes, el conductor de un talk show.
“En la pandemia ha sido aún más duro hacer cine, algunos se retiraron del género porque cuesta mucho. Siempre ha sido así. Gracias a esta película, donde comparto créditos con Giselita Ponce de León, descubrí el stand up porque mi personaje usa ese género para sanarse y yo terminé enamorándome del stand up. Siento que en esta cinta doy mi mejor actuación, no sé si así se verá, pero lo siento y significa muchísimo para mí. Y ahora mi unipersonal, que estará el 3, 10 y 17 de diciembre en el Teatro Barranco, habla de mi vida, de lo que fue Lalo, mi personaje de ‘1000 oficios’ y de lo que fue mi revolcón como padre, con mis hijos y, además, un poco de lo que es mi vida con déficit de atención (TDAH)”.
—¿Por qué piensas que Muertos de risa marca un antes y un después en tu carrera?
—La película habla de un pata que trabaja en la TV y que ha estado tan expuesto que ha dejado su lado humano muy al costado. Y a partir del fallecimiento de su padre comienza a darse cuenta de muchas cosas que no podía ver. De hecho, me ha tocado en mucho sentido esa película porque habla de muchos temas que a mí me han rotado en la cabeza y que me ha costado mucho curar y ponerlos en cierto equilibrio. En realidad, he tenido la suerte de hacer dos grandes películas.
César Ritter saltó a la fama gracias a su papel de 'Lalo' en "1000 oficios". Foto: Instagram César Ritter/América TV
—¿Por qué defines tu etapa como un revolcón?
—Me refiero a que es lo mejor que me ha pasado y también porque puso a todo lo demás en segundo plano. Y cuando eso ha ocurrido, me he podido burlar un poco de mí, de mi profesión, de mi déficit de atención. Lo que significa para mí el hecho de ser padre son unas ganas tremendas por llegar a viejo, por tratar de mejorar cada día, porque al final no enseñamos con las palabras sino con el ejemplo. Entonces, no queda más que ser la mejor versión de uno mismo y en ese ínterin, claro, he cometido varios errores y, bueno, parte de eso también lo cuento y me río de eso en Papá palayentis.
—Hoy es más común que se hable del TDAH. ¿Ha sido difícil para ti?
—Más que difícil creo que la enseñanza en este país, al menos en los 70 u 80, tradicional, poco alternativa, para mí aprender de esa manera fue muy complicado y el teatro más bien un poco me salvó, me ayudó a encontrar lo poquito que sé. En el unipersonal también cuento mi experiencia con el TDAH y me burlo y, claro, lo pongo sobre la mesa y digo que no tiene que ver con una capacidad menor ni nada por el estilo, simplemente eres diferente.