Descenso Liga 1: Vallejo y Mannucci bajan, UTC se salva
Estos son los equipos que jugarán la Liga 1 en 2025
Espectáculos

Javiera Mena: “A la gente aún le choca la palabra lesbiana”

Ícono queer y por ser una potente voz de los movimientos feministas y LGTBIQ+, Javiera Mena habla sobre lo que significa para ella formar parte de esta comunidad y de cómo vive la pandemia.

Javiera Mena es una de las artistas chilenas más importantes de su país. Foto: Javiera Mena/Prensa
Javiera Mena es una de las artistas chilenas más importantes de su país. Foto: Javiera Mena/Prensa

Javiera Mena es una de las cantantes chilenas más importantes en la actualidad, ya que desde que apareció en escena con su disco debut Esquemas juveniles, en 2006, impuso su electro pop con toques de erotismo.

Abiertamente lesbiana, la intérprete de “Luz de piedra de luna” se ha convertido en un referente del movimiento LGTBIQ+ de su país y de Latinoamérica. Y para alegría de muchos seguidoras y seguidores peruanos, la artista vuelve a nuestro país luego de dos años para ofrecer un íntimo concierto como parte de su gira Entusiasmo Tour este miércoles 8 de diciembre en el C.C. de Barranco

A horas de iniciar su show, La República conversó con Javiera Mena para que nos cuente cómo ha sobrellevado la pandemia, su activismo y lo que veremos esta noche.

- ¿Cómo ha sido para ti sobrellevar la pandemia?

Me siento como muy bendecida por cómo la he pasado, todo lo que me ha enseñado la pandemia, me siento preparada. Siendo un artista independiente, de haber tenido que arreglármelas en esta industria por ser fiel a mi arte, me ha llevado a sobrevivir con poco, tener menos, ajustar mi presupuesto porque es algo que he hecho toda mi vida básicamente. En ese sentido, no ha sido tan duro para mí, he podido descansar, valorar la gira, pero también he tenido cero creatividad por tres meses sin hacer nada, estuve deprimida como todo el mundo por esto de que nadie podía salir a la calle. Después, pude crear, soy productora, grabé mi disco sola en mi casa. Me sentí preparada para todo, me sentí como a prueba de balas, la verdad.

- Desde que iniciaste en la música hasta la actualidad, ¿cuánto crees que has evolucionado?

Yo he evolucionado mucho, me gustan los artistas que van cambiando todo el tiempo como David Bowie por ejemplo. Soy muy inquieta, no me puedo quedar con la misma forma de ser, aunque me funcione, siempre me he arriesgado a cambiar y si no lo hago, me moriría porque eso es quien soy. Partí con folk, luego me puse más electro, ahora estoy haciendo cosas más conectadas con el erotismo, pero sigo trabajando con el electro pop. Siento que he evolucionado y mi camino ha sido eso, el cambiar es como mi prioridad, no quedarme en lo mismo y modificar mi escritura.

- ¿Un artista que no evoluciona se estanca?

Creo que depende de la personalidad de cada artista. Por ejemplo, hay bandas como los Ramones que siempre se mantuvieron en lo mismo y me parece maravilloso su historia, su esencia o artistas de hip hop. En mi caso, pienso que cada artista tiene su traje diseñado y no podría juzgar a otros. Hay algunos que se estancan, pero eso mismo los hace evolucionar, es muy raro. A mí me gusta cambiar todo al 100%. A pesar de que yo no hago grandes cambios estéticos, siempre he mantenido mi pelo negro largo o con coleta, hay otras artistas que se cambian el color del pelo. En ese sentido, me mantengo bastante clásico, sin embargo, la música, videos y ahí sí que cambio.

- Comentaste que ser lesbiana ha sido tu forma de hacer activismo, ¿a qué te referías exactamente?

En el momento que yo aparecí, no había ninguna lesbiana, había, pero todo ‘closeteado’ (en el closet). La misma gente ‘closeteaba’ a las lesbianas. Algo pasa, la gente no quiere ver que hay muchas lesbianas en la historia, hacen como si no existieran. Primero soy artista, mujer y también lesbiana y lo dije abiertamente. El tema se volvió más importante que mi música y me di cuenta de cómo en Perú, Chile o México no hay muchas chicas que dicen ‘soy lesbiana’. Incluso, la palabra lesbiana a la gente le choca, les cuesta decirlo. A mí se me abanderó. Y yo sin ímpetu de activismo, creo que inconscientemente sí, más por las ganas de que se abriera todo, porque sentía que estaba en un mundo donde había fiestas de gays y no de mujeres y yo quería más de lesbianas, porque quería ligar un poco (risas).

- ¿Cómo inspiras al colectivo LGTBIQ+ con tu música?

Yo creo que inspiro con mi autenticidad y visibilidad. Tengo el privilegio de tener una familia que nunca me criticó por ser lesbiana, a no ser por una que otra broma por ahí, pero eso me dio el valor y la fuerza para decirlo abiertamente. Mi familia es muy católica y me han querido como soy. De ese lugar luminoso de la homosexualidad siempre he inspirado, desde mis videos al poner a dos chicas. Mi activismo y mi inspiración va por el lado luminoso de ser homosexual. Yo siempre me he visto bendecida.

- Eres considerada un ícono queer, ¿cómo te sientes al respecto?

Me siento bien como pionera y orgullosa, e invitar a la gente heterosexual que también puede sentirse identificada con mi música y creo que eso va a pasar eventualmente. Siento que la gente me valora y yo feliz. Sé que hay algunos compañeros artistas que no lo quieren decir por miedo a que los encasillen en el nicho gay yo no tengo ese miedo porque la verdad siempre cae por su propio peso y mi música va a trascender el movimiento Queer.

- ¿Qué nos espera en el show de esta noche?

Estoy muy entusiasmada de volver a Lima. Será un show muy femenino, somos tres chicas sobre el escenario. Haré un repaso por toda mi carrera y también por los nuevos. Habrá mucho baile, balada y también un espectáculo visual muy interesante.

Colaboración con Myriam Hernández

- Hace poco lanzaste la canción “Dunas” en colaboración con Myriam Hernández

Yo soy fanática de Myriam, de toda su trayectoria, y creo que es una mujer poderosa, en Chile es referente de una ‘mujer power’. Al momento de buscar una colaboración, porque es algo que me sugerían, dije: ‘Hago una colaboración con alguien de una generación antes que la mía’ y pensé en Myriam Hernández.

Es alguien que se valora mucho en Perú, en Estados Unidos, pero en Chile necesita más valoración porque los chilenos no valoramos tanto a nuestros artistas y yo quise reivindicarla e invitarla a cantar, sacarla de su zona normal que es la balada y llevarla a un terreno más dance, moderno, que sea una canción super sensual. Ella se prestó para todo, fue al estudio, se puso a hacer unos gemidos espectaculares, una maravilla trabajar con ella, he aprendido un montón y la quiero mucho.