Economía

El GLP vehicular podría volver al Fondo de Estabilización, anuncia el MEF

El ministro José Arista reveló que la deuda actual que el Estado peruano mantiene con los proveedores de este combustible supera los S/1.000 millones. El 80% de los insumos del GLP consumido por los peruanos sale de Camisea, donde también se produce el gas natural.

Balón de cocina. El GLP es utilizado como GLP-E para cocinar, y como GLP-G para vehículos. Es el mismo combustible, pero vendido a precios distintos según su uso. Foto: difusión
Balón de cocina. El GLP es utilizado como GLP-E para cocinar, y como GLP-G para vehículos. Es el mismo combustible, pero vendido a precios distintos según su uso. Foto: difusión

El ministro de Economía y Finanzas, José Arista, indicó que el gas licuado de petróleo (GLP) podría mantenerse en el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), debido al incremento reportado en la última semana.

En diálogo con RPP Noticias, el titular del MEF reveló que la deuda actual que el Estado mantiene con los proveedores de este combustible supera los S/1.000 millones.

"Hemos recibido los comentarios y estamos viendo la manera de incluir otra vez al GLP en el FEPC. Tenemos una deuda de S/1.000 millones y es por eso que queremos ser bastante cautos con este tema", declaró el ministro. Sin embargo, la versión del GLP de cocina ya está en el fondo hasta junio, por lo que el ministro se referiría al vehicular.

El FEPC funciona como una banda de precios que fue creada en 2004 para evitar que la volatilidad de los precios globales de los combustibles puedan golpear a los hogares peruanos. Perú es un país deficitario de petróleo, no produce más de 40.000 barriles por día (bpd), pero consume 250.000 bpd.

La banda de precios opera con un precio máximo y un precio mínimo: cuando el GLP -u otro combustible considerado para el FEPC- está por debajo de la línea inferior, el consumidor paga el tope mínimo y la diferencia se va al fondo administrado por el Estado.

Del mismo modo, cuando el precio global rompe la línea superior, el usuario solo paga el tope máximo y el resto lo paga el Estado a partir de los recursos en el fondo.

El problema se da cuando el precio del GLP no deja de subir, entonces el fondo nunca tiene dinero y, en la práctica, es el Estado el que asume la deuda y subsidia el combustible, acumulando una deuda histórica hoy revelada por el ministro Arista.

En Perú ocurre una situación particular: el GLP no solo se puede producir con petróleo, sino con líquidos de gas natural (distintos al propio gas natural). Es así que el 80% del GLP consumido por los peruanos sale de Camisea, pero se vende internamente a precio internacional por contrato.