Economía

Economía peruana cae 0,55% en 2023 y se confirma mayor retroceso en 31 años

Contracción. Fueron seis sectores que inclinaron la balanza en el último año, sobre todo manufactura, que retrocedió 6,65% y es el que más aporta al PBI. Para enero se espera un cifra positiva, pero solo por rebote, por lo que se habla de una recuperación lenta.

Impacto.  La manufactura primaria cerró en -2,8%, principalmente por la menor elaboración y conservación de pescado. Foto: difusión
Impacto. La manufactura primaria cerró en -2,8%, principalmente por la menor elaboración y conservación de pescado. Foto: difusión

Desde 1992 —sin contar con la pandemia— no se registraba un retroceso de la producción nacional hasta este 2023, que cerramos en -0,55%, con lo que se confirmó la mayor caída en 31 años, de acuerdo a los datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Aunque la distancia es grande, ambos años se caracterizan por haber soportado el paso del fenómeno El Niño (ver infografía).

Manufactura (-6,65%), construcción (-7,86%), financiero (-7,85%), telecomunicaciones (-5,80%), agropecuario (-2,91%) y pesca (-19,75%) fueron los sectores que más influyeron en el resultado anual.

Aunque manufactura no es el sector con la caída más pronunciada, sí es el que más aporta al PBI. Por subsectores, el primario cerró en -2,8%, principalmente por la menor actividad de elaboración y conservación de pescado, crustáceos y moluscos, ocasionado por la reducida captura de anchoveta y otras especies para la elaboración de harina y aceite de pescado, de acuerdo a la Sociedad Nacional de Industrias (SNI).

Mientras, la manufactura no primaria —la de mayor valor agregado—, tuvo un descenso del 8,1% en el 2023, ocasionado por el retroceso de la producción de bienes de consumo con una caída de 7,4%.

Respecto a la pesca del tipo marítimo, hubo una disminución de 21,78% por menor extracción de especies destinadas al consumo humano indirecto o de uso industrial, con una captura total de anchoveta de 1 millón 993.295 toneladas que, frente a 4 millones 040.661 toneladas del año 2022, significó una baja de 50,67%.

Cabe recordar que en este mes, mientras estaba en marcha la segunda temporada de pesca, la mayoría de embarcaciones pararon sus actividades voluntariamente debido a la constante presencia de juveniles.

Por el lado del consumo humano directo se incrementó 3,49%, por mayor disponibilidad de recursos que se ofertan congelados como el jurel, caballa, bonito, perico, atún, tiburón, anguila y pulpo, que se vieron favorecidos por el calentamiento del mar a causa de El Niño.

Al otro lado, minería e hidrocarburos (8,21%), comercio (2,36%), transporte (1,27%), alojamiento y restaurantes (2,68%), servicios (0,50%), electricidad (3,68%), administración pública (2,94%) y otros servicios (3,51%) compensaron la balanza.

Cabe precisar que sin la contribución positiva del sector minero, la contracción del PBI en el 2023 hubiese sido de 1,4%, de acuerdo al Instituto Peruano de Economía (IPE).

Perspectivas

Aunque el resultado anual no ha sido una sorpresa, de hecho, el Banco Central de Reserva (BCRP) tenía proyectada una caída de 0,50%, sí llamó la atención la cifra de diciembre que registró una caída de 0,76%, cuando se esperaba un resultado, aunque magro, positivo.

En lectura de Juan Carlos Ordar, director de Phase Consultores, si bien pesca (-51,34%) y su impacto en manufactura (-10,92%) fueron los que más incidieron en la cifra de diciembre, sobre todo refleja un “estancamiento generalizado y vulnerabilidad a choques relativamente fuertes”.

Así detalla que para recuperar el nivel de enero de 2022, el primer mes de 2024 debe marcar una tasa de 1,8%, lo cual en su opinión es improbable. “Lo bueno es que la recuperación ya empezó. Lo malo es que es lenta y seguirá así”, sostiene.

Por su parte, el exministro de Economía Alfredo Thorne no es tan optimista y refiere que si bien la tasa de enero será positiva, responderá a un efecto estadístico por la fuerte caída de enero de 2023. “Es momento de pensar en un programa bien estructurado de estimulo con el sector privado”, comentó en X (Twitter).

Por su parte, IPE sostiene que desde diciembre hay una incipiente recuperación, pues desde los sectores no primarios vinculados a la demanda interna habrían registrado un crecimiento anual de 1,4%, la primera cifra positiva luego de doce meses de caídas consecutivas.

“Ello refleja la disipación de choques adversos que interrumpieron actividades relacionadas al consumo (como en comercios y servicios) y la inversión (construcción)”, explican.

Para los siguientes meses el panorama podría mejorar debido a que las anomalías climáticas se irán normalizando. De esta manera, las expectativas del sector privado también deberían ser más positivas, según el IPE.

INEI: 3 de cada 10 empleados son formales

  • En 2023, la tasa de formalidad pasó de 26% a 28,9%, mientras que la de informalidad retrocedió de 74% a 71,1%, según el INEI. Es decir, 3 de cada 10 trabajadores se desenvuelven dentro del marco legal.
  • Por tamaño, el 85,1% de los ocupados en empresas de 1 a 10 trabajadores son informales (mypes), y un 46,7% lo son en las de 11 a 50 trabajadores (pequeñas empresas). El grueso de los formales (83,7%) está en grandes empresas.
  • Agricultura, pesca y minería (80,3%), manufactura (62,3%) son los que más trabajadores informales concentran.
larepublica.pe

Bachiller en Comunicación Social por la Universidad de Lima con especialidad en Periodismo. Escribo sobre temas económicos con enfoque en el sector pesquero.