Calificadoras degradan deuda de Argentina por la creciente incertidumbre
Advierten riesgo de default. Las elecciones primarias del 11 de agosto provocó un colapso de la confianza de los mercados, incluyendo una aguda depreciación del peso.
Las calificadoras de Fitch y S&P degradaron la nota de la deuda de Argentina debido a la incertidumbre política y el riesgo de default.
“El recorte de la nota de Argentina refleja una elevada incertidumbre política después de las elecciones primarias del 11 de agosto, un severo endurecimiento de las condiciones financieras y el esperado deterioro del ambiente macroeconómico que aumenta la posibilidad de un default de la deuda soberana o de una reestructuración de algún tipo”, dijo la entidad.
Fitch rebajó la calificación de la deuda argentina desde "B" hasta “CCC”, una categoría que indica hay posibilidades de un default. Según la calificadora, las elecciones primarias resaltaron los riesgos de una discontinuidad de las políticas después de las elecciones generales de octubre.
Cristina Fernández quedó como favorita tras imponerse en las primarias abiertas con 47% de los votos frente al 32% que cosechó Macri. “Esto ha provocado un colapso de la confianza de los mercados, incluyendo una aguda depreciación del peso”, dijo Fitch.
Por su parte, la calificadora S&P rebajó la nota un escalón de "B" a “-B”. “La pronunciada turbulencia del mercado financiero, con una depreciación significativa del peso argentino y un repunte en las tasas de interés, tras las elecciones primarias del domingo pasado en Argentina, se ha debilitado significativamente el ya vulnerable perfil financiero del soberano”, señaló.
Esos resultados se convirtieron en una poderosa señal política que puso en duda la continuidad del proyecto de Macri, quien lleva adelante un severo ajuste fiscal con un auxilio por 56 mil millones de dólares de parte del Fondo Monetario Internacional (FMI).
La oposición ha cuestionado el acuerdo con el FMI, en medio de una dura crisis financiera que ha llevado a la pobreza a un nivel del 32% en un país que tiene una de las inflaciones más altas del mundo, con un aumento de los precios de 25,1% hasta julio y 54,4% en 12 meses.
Volatilidad reciente
La crisis comenzó con una estampida cambiaria en abril del 2018, que llevó a Macri a acudir al FMI para apuntalar la economía.
El año pasado, la economía cerró el año con una contracción de 2,5% y para este año el FMI ajustó a la baja sus proyecciones, anticipando una caída del PBI de 1,3% en el 2019.
Con respecto al crecimiento, Fitch proyecta una contracción de 2,5%, frente a una estimación previa de una caída del PBI de 1,7% debido a la "creciente probabilidad de que la moderada recuperación que antes se esperaba para la segunda mitad del año ya no se materialice”.
Del total de la deuda, casi un 80% está denominada en moneda extranjera, en un momento que el peso argentino cerró la semana con una pérdida del 19,91% de su valor.
“Este recorte de la nota no fue sorprendente dada la volatilidad reciente y el colapso del peso”, dijo a AFP, Benjamin Gedan, director del programa sobre Argentina en el centro de estudios del Wilson Center.
AFP